Estos son los buques de guerra con misiles que Estados Unidos ha enviado al Caribe, según el Financial Times
El despliegue incluye ocho buques de guerra, cinco con misiles Tomahawk, un submarino nuclear y el USS Iwo Jima con 4.500 marines, según el Financial Times.
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Un informe del Financial Times reveló que el gobierno de Estados Unidos ha activado una operación naval de gran escala en aguas del Caribe y el Pacífico cercano, elevando significativamente la tensión en la región. Aunque la administración Trump sostiene que el objetivo es combatir el narcotráfico, el volumen del despliegue ha generado preocupación geopolítica, especialmente en torno a Venezuela.
La movilización incluye una combinación de buques con alta capacidad ofensiva, presencia anfibia y disuasión submarina. Fuentes citadas por el medio británico indican que el Pentágono ha puesto en marcha una fuerza naval que, por su tamaño y armamento, podría responder tanto a amenazas del crimen organizado como a escenarios de presión directa sobre regímenes señalados por Washington.
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¿Cómo son los ocho buques de guerra que desplegó Estados Unidos en el Caribe?
El despliegue naval de Estados Unidos incluye ocho buques de guerra con distintas capacidades ofensivas, defensivas y logísticas, según reveló el periódico británico. Entre ellos hay tres destructores lanzamisiles guiados —USS Jason Dunham, USS Gravely y USS Sampson— diseñados para ataques de precisión, defensa aérea y operaciones navales complejas.
También integran la flota el crucero lanzamisiles USS Lake Erie, especializado en control táctico y misiones de apoyo avanzado, y el USS Iwo Jima, un buque de asalto anfibio que transporta a más de 4.500 marines, helicópteros y vehículos de combate. Este último opera junto a dos embarcaciones de apoyo que refuerzan su autonomía operativa en mar abierto.
Por último, el submarino de ataque rápido USS Newport News, propulsado por energía nuclear, aporta capacidad de vigilancia encubierta y respuesta táctica desde posiciones no detectables. Además, cinco de los ocho buques están equipados con misiles Tomahawk, proyectiles de largo alcance capaces de atacar blancos terrestres con alta precisión, lo que otorga a esta flota una potencia de fuego significativa.
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¿Cómo respondió el régimen de Maduro al despliegue naval de EE. UU.?
Tras conocerse el movimiento militar estadounidense en aguas del Caribe y el Pacífico cercano, Nicolás Maduro reaccionó ordenando la movilización de 4,5 millones de milicianos para reforzar la defensa territorial. En una serie de discursos recientes, el mandatario venezolano calificó el despliegue como una amenaza directa y aseguró que su país "no se inclina ante nadie".
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, también anunció una contraoperación naval cerca del principal centro petrolero de Venezuela. Según el medio internacional, esta respuesta busca proyectar capacidad de reacción militar ante un eventual escenario de escalada, aunque se mantiene dentro del marco de maniobras defensivas internas.
¿Qué posición adoptaron los países vecinos frente al despliegue militar?
La creciente tensión en el Caribe ha generado diversas reacciones en América Latina. De acuerdo con el FT, los gobiernos de Guyana y Trinidad y Tobago respaldaron la presencia militar estadounidense en la zona, como una medida necesaria para frenar el flujo de drogas y garantizar la estabilidad regional.
Por otro lado, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, sugirió en un primer momento que un ataque a Venezuela sería equivalente a un ataque a toda América Latina, aunque más tarde matizó su postura, señalando que el objetivo es coordinar esfuerzos binacionales contra el narcotráfico. Esta ambigüedad refleja la complejidad del contexto regional en torno a la operación liderada por Washington.






















