Alarma en Corea del Sur por rebrote del coronavirus
Peligro. Medio centenar de casos graves fueron detectados entre los miembros de la iglesia Grace River de Seongnam.
Las iglesias cristianas en Corea del Sur prometen la vida eterna, pero se han convertido en las principales responsables de las muertes producidas por el coronavirus. Y ahora son responsables de la resurrección del mal.
Cuando en todo el mundo se informaba sobre el efectivo tratamiento aplicado por el Gobierno coreano, un nuevo caso despertó la alarma en el país asiático: 46 nuevos enfermos aparecieron entre los fieles de la iglesia Grace River (“Río de la Gracia”) de Seongnam y despertaron las alarmas justo cuando el Gobierno anunciaba el control de la pandemia local.
Los nuevos casos fueron contagiados por el pastor de esta iglesia y su esposa, quienes siguieron celebrando misas pese a la prohibición. Como se sabe, Corea del Sur fue el segundo país con mayor número de pacientes del Covid-19, después de China.
Las anteriores epidemias transmitidas desde el gigante asiático generaron en Corea del Sur protocolos de reacción muy eficaces. Tan buenos que han sido replicados en países europeos gravemente afectados por la pandemia.
La agencia EFE informó que para aliviar la sobrecarga sanitaria que genera la hospitalización de pacientes con Covid-19 el Estado coreano designó 60 hospitales solo para pacientes con coronavirus o males respiratorios y otros 302 con instalaciones separadas del resto.
Además, del gobierno central, los gobiernos regionales y municipales tienen acceso a un sistema de mensajes en celulares para alertar por la aparición de brotes de infección. Los mensajes remiten a las webs de los municipios, que instan a ciudadanos a no estar muy cerca de focos detectados.
Fe que contagia
En Corea del Sur se han registrado poco más de 8.500 casos de hospitalizados, de los cuales el 60 por ciento fueron provocados por los fieles de la Iglesia de Jesús Shincheonji, Templo del Tabernáculo de Testimonio, secta millonaria que asegura tener más de 250 mil fieles y sucursales en el mundo. Su pastor, Lee Man-hee, asegura ser la “segunda venida de Cristo”.
Ahora se sabe que una de sus fieles, de 61 años, fue la “paciente cero” quien, pese a saber que estaba con el virus, asistió a su iglesia, donde le prometieron curarla con oraciones.
Hace tres semanas, cuando se lanzó un protocolo de prevención en todo el país, en esta secta continuaron celebrando ceremonias y se propagó el mal. El rechazo fue total. Por lo menos medio millón de coreanos firmaron un pedido dirigido al Gobierno para disolver estas agrupaciones religiosas.
Los expertos sanitarios coinciden en que estas iglesias son las principales responsables de los contagios por coronavirus.
Hasta hace unos días, el Gobierno coreano celebró el freno a la expansión del mal. Ahora se volvieron a lanzar los protocolos ante la aparición de medio centenar de casos en la iglesia Grace River de Seongnam.