
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, expresó estar “muy preocupado” por el despliegue militar de Estados Unidos en el mar Caribe, cerca de Venezuela, y buscar ser el intermediario con Donald Trump, antes de que empiece un conflicto.
"Estoy muy preocupado por el dispositivo militar estadounidense desplegado por Estados Unidos en el mar Caribe. Esto me preocupa enormemente y tengo intención de discutirlo con el presidente Trump, porque me preocupa", declaró Lula a la prensa en Johannesburgo, al término de la cumbre del G20.
Estados Unidos acusa a Nicolás Maduro de liderar un cártel de drogas "terrorista" y Trump no ha descartado enviar soldados estadounidenses. "Es importante que intentemos encontrar una solución antes de que empiece" un conflicto, dijo Lula, señalando que Brasil comparte frontera con Venezuela.
Trump no asistió a la cumbre del G20 en Sudáfrica, con el argumento de que sus prioridades van en contra de las políticas estadounidenses.
La administración de Trump ha desplegado en el Caribe el portaaviones más grande del mundo, acompañado de una flota de buques de guerra y aviones de combate para llevar a cabo operaciones antidrogas. EE. UU. advirtió el viernes a las aeronaves civiles en el espacio aéreo venezolano que "actúen con cautela".
Desde septiembre, las fuerzas estadounidenses han llevado a cabo ataques contra más de 20 embarcaciones en el Caribe y el Pacífico oriental, matando a más de 80 personas. Según Estados Unidos, eran narcotraficantes, pero no aportaron pruebas.
Maduro retó públicamente al presidente Donald Trump, al proponerle un encuentro cara a cara. La declaración fue una respuesta a la posibilidad de establecer un diálogo entre ambos gobiernos, una idea que había sido mencionada por el mandatario republicano. "Este país va a continuar en paz y en Estados Unidos el que quiera hablar con Venezuela se hablará, 'face to face', sin ningún problema", expresó Maduro durante su programa televisivo 'Con Maduro'.
En septiembre, el líder chavista ya había enviado una carta a Trump en la que proponía abrir un canal de diálogo con el objetivo de mantener la paz. Sin embargo, la Casa Blanca rechazó la propuesta, reafirmó su postura y acusó a Maduro de encabezar redes de narcotráfico. Aunque no hay una decisión oficial, aún se mantiene abierta la posibilidad de una intervención militar, lo que mantiene en vilo a la población venezolana.