El doctor chileno Andrés Meza, de 41 años, presentó síntomas de COVID-19 desde hace un mes, pero se pudo recuperar después de recibir el tratamiento de plasma de pacientes convalecientes.
El galeno se convirtió en el primer paciente en recuperarse de la enfermedad tras recibir una transfusión de plasma de un paciente curado.
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“Extrañamente ayer me estaba muriendo y hoy me siento, casi mágicamente, muy bien", manifestó Meza.
US Secretary of State Mike Pompeo speaks the press at the State Department in Washington, DC, on May 20, 2020. (Photo by NICHOLAS KAMM / POOL / AFP)
Hasta la fecha, 22.504 personas se han recuperado de la COVID-19 en Chile y el doctor Meza es uno de ellos, convirtiéndose en el primero en hacerlo a través de un tratamiento de plasma hiperinmune.
“El 17 de abril me tocó atender a una colega del hospital, han caído con coronavirus muchos doctores y enfermeras del hospital de San Antonio. Tras atender a la doctora, le tomé el examen de PCR y le hice la licencia que se da por tres días, hasta obtener el resultado”, manifestó.
Detalló, además, que mantuvo contacto muy estrecho con ella a menos de un metro. Dijo que la doctora tosió en varias oportunidades (sin saber que tenía COVID-19) cuando conversaban y cree que en uno de esos momentos se contagió.
Meza contó que ya tenía fiebre y dificultad para respirar desde el pasado 23 de abril. "Me rescataron desde mi domicilio con ambulancia”, expresó.
“Me llevaron a una urgencia respiratoria, donde me tomaron exámenes de sangre y un escáner de tórax, donde se ve la peor complicación que puede dar el coronavirus: una neumonía multilobar bilateral", detalló.
Posteriormente fue trasladado a Santiago pero allí todo empeoró, quedó hospitalizado con oxígeno y no evolucionaba. Luego le avisaron que sería trasladado a la UCI de la clínica, con grandes posibilidades de ser intubado.
US Secretary of State Mike Pompeo speaks the press at the State Department in Washington, DC, on May 20, 2020. (Photo by NICHOLAS KAMM / POOL / AFP)
Meza es un médico cirujano y antes de infectarse se desempeñaba en la Unidad de Urgencia Respiratoria. Pasó dos meses internado y conectado a un ventilador mecánico.
“Si bien tenía claro que existía un riesgo, porque estaba tratando con pacientes infectados por este virus, uno tiene la esperanza que la protección que ocupas y los cuidados que tomas de alguna manera te ayudarán. Sin embargo, este virus es muy potente, y aún hay muchas cosas que no sabemos y que se irán aprendiendo en el camino”, describió.
Andrés Meza confesó que después de recibir la transfusión del plasma todo cambió en cuestión de horas. “El 27 de abril, a las 9:00 a. m., amanezco en excelente condiciones, sintiéndome mucho mejor que el día anterior”, manifestó el doctor, quien un día antes estaba muy mal.
El doctor Meza considera que el virus es muy potente y que hay muchas cosas que son desconocidas, pero que se irán aprendiendo en el transcurso de los días.
Customers buy food from a vendor (R) at a meat stall in Wuhan in China's central Hubei province on April 18, 2020. (Photo by Hector RETAMAL / AFP)
El médico explicó al medio La Tercera que el tratamiento se basa en “sacar una muestra de sangre, de allí extraen elementos como los glóbulos rojos y dejan los anticuerpos presentes en esa sangre, que son los anticuerpos que desarrolló durante su enfermedad para combatir el virus. Entonces le pasan ese plasma que tiene los anticuerpos a un paciente que aún no ha mostrado su respuesta inmune, es decir, un paciente que aún no tiene anticuerpos".
Las gestiones para que el médico recibiera el plasma fueron hechas por la Fundación Arturo López Pérez. El tratamiento, que ha sido aplicado en varios países, representa una fuente de anticuerpos de origen humano que podría contribuir a suprimir la enfermedad a mayor velocidad. Pese a que es una práctica que data de más de 100 años, aún se estudia su efectividad contra el coronavirus.