Tendidos sobre la carretera, decapitados o aniquilados en clubes noctunos. En la primera quincena de 2020, en Guanajuato (estado central de México) se han registrado al menos 210 asesinatos.
Es decir, unas 14 vidas se apagan cada día. La mayoría de víctimas, entre los que fiiguran tres policías, son producto del narcotráfico, de acuerdo al Sistema Nacional de Seguridad Pública de México.
Esta zona, donde se ubica el llamado Triángulo del Huachicol, es controlada por El Mencho y el Marro, dos capos del narcotráfico que mantienen en jaque al Gobierno de Andés Manuel López Obrador (AMLO).
El derramamiento de sangre originado por el narco nunca se detuvo en México.
A inicios de diciembre de 2019, 23 personas fueron secuestradas en un centro de rehabilitación por adicciones, aunque 13 de ellas fueron liberadas poco después.
En agosto, ocho personas murieron en un ataque a un billar en la ciudad de Irapuato. En ese mismo mes, cinco presuntos delincuentes y un miembro de la recién creada Guardia Nacional murieron en un enfrentamiento armado en la localidad de Yuriria.
Guanajuato es uno de los centros industriales más importantes de México, pues concentra a grandes fabricantes mundiales de automóviles, aviones y otras manufacturas pesadas.
Estas actividades, así como la presencia de importante infraestructura energética, atraen a organizaciones criminales como el Cártel Jalisco Nueva Generación o el Cártel de Santa Rosa de Lima que, además del narcotráfico, se dedican a actividades como la extorsión, el secuestro y el robo de combustible.
De acuerdo a AFP, la inhumación clandestina es una práctica recurrente de narcotraficantes y autoridades corruptas en México para deshacerse de sus víctimas.
Según cifras del gobierno, sólo en 2019 se encontraron 873 fosas clandestinas, de las cuales fueron exhumados 1.124 cuerpos, y de estos 395 fueron identificados.
Más de doscientos homicidios en la primera quincena de este año, 2020, significa una alerta imperante al gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
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De acuerdo con los reportes diarios de la Fiscalía General del Estado (FGE), los crímenes se han registrado en ciudades como Salamanca, Irapuato, Celaya, San Miguel de Allende, Valle de Santiago, Comonfort, Tarimoro y Yuriria.
Dentro de los casos más atroces ocurrido entre estas fechas se incluye al del paso miércoles, donde el Grupo Élite del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG de México) se adjudicó la muerte de 9 personas en dos ataques diferentes, uno en Celaya y el otro en Tarimoro.
Este fin de semana también se reportó el supuesto asesinato de la hermana de El Marro, identificada como Karem Lizbeth Yépez Ortiz, quien habría sufrido un atentado mientras asistía a una boda.