Delincuentes asesinan a empresario del Cacao en Tingo María tras más de 13 días desaparecido: pedían S/3 millones para liberarlo
César Augusto Ortiz Alponte fue asesinado en Tingo María tras permanecer secuestrado desde el 2 de septiembre. Su cuerpo fue hallado calcinado en un descampado en la localidad Santa Rosa, con signos de la brutalidad del crimen.
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Cuando César Augusto Ortiz Alponte llegó a Tingo María, con la intención de adquirir terrenos para cultivar cacao y plátano, nunca imaginó que pondría su vida en peligro. Aquel suceso ocurrió el 30 de agosto y dos días después –el 2 de septiembre– desapareció sin dejar rastro, luego de salir del Hotel Internacional. Con solo 42 años, días más tarde se encontraron sus restos calcinados en un descampado de la localidad de Santa Rosa, en Aguaytía.
Tras las primeras pericias policiales se reveló que detrás del asesinato estaba una banda, la cual denominaron como “Los hoteleros de la muerte”, operada por recepcionistas de un hospedaje local que facilitaron información sobre la víctima a la organización delictiva. Los criminales exigieron una suma de S/3 millones para su liberación. Al no conseguir el dinero, ejecutaron al empresario con extrema violencia.
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Asesinan a empresario del Cacao
La madrugada del 2 de septiembre, Ortiz Alponte salió del Hotel Internacional, ubicado en la avenida Raimondi, con dirección a la zona conocida como El Afilador, en la carretera Tingo María-Huánuco. Una cámara de seguridad filmó el último registro del empresario antes de su desaparición tras descender de un taxi que lo dejó en el grifo García.
Horas después de la desaparición, la familia recibió llamadas y mensajes de WhatsApp en los que los delincuentes advertían que, si no pagaban la suma exigida, la víctima sería mutilada. Junto a las amenazas se envió un video del hombre con los ojos vendados pidiendo ayuda. Los criminales pedían S/3 millones por la libertad del empresario y señalaron que por cada día de demora le cortarían un dedo. Asimismo, dejaron claro que de no obtener respuesta inmediata lo ejecutarían.
Una de las primeras en recibir los mensajes fue la hermana de la víctima, quien vive en Moquegua. Debido a que la familia no pudo reunir la suma solicitada, los implicados asesinaron a Ortiz, luego de torturarlo.
El fin de los “Los hoteleros de la muerte”
El Depincri Leoncio Prado inició las investigaciones del caso y pronto dieron con el paradero del grupo de recepcionistas del Hotel Internacional, quienes colaboraron directamente con la organización criminal. Según la Policía, Carlos Daniel Espinoza Domínguez sería el presunto cabecilla y tendría vínculos con la red Los Pulpos Nueva Generación.
La pesquisa arrojó que Espinoza aprovechó la amistad que tenía con Ortiz Alponte para coordinar el encuentro que lo llevaría hacia su muerte. Días antes del secuestro pidió licencia laboral y dejó a cargo a la esposa de su primo, Juan Roger Deza Espinoza, también detenido. La autoridad también detuvo a Enma López Muñoz y Thalía Ramos Romayna, recepcionistas que habrían participado en el plan para citar a la víctima y trasladarla al lugar de cautiverio.

La policía dio con el paradero de varios miembros de la banda delictiva. Foto: PNP.
Hallazgo de los restos
Luego de la captura de López Muñoz, la Policía pudo hallar la vivienda donde el empresario estuvo secuestrado. Seguido de ello, los agentes geolocalizaron el número telefónico de Carlos Espinoza en la zona de Santa Rosa, provincia de Padre Abad, en Ucayali.
En aquel lugar, la Policía encontró el cadaver calcinado de una persona en un descampado. Tras pasar las diligencias, se confirmó que se trataba de Ortiz Alponte, quien había sido torturado antes de ser descuartizado y enterrado. Los restos fueron trasladados a la morgue de Tingo María mientras continúan las investigaciones para encontrar con los demás implicados en el crimen.






















