Irán: presidente Masud Pezeshkian advierte que Teherán podría ser evacuada debido a la sequía
El mandatario iraní advirtió que será necesario racionar el agua hacia finales de noviembre y esperar a que llueva. De no ser así, la capital tendría que ser evacuada.
- El río más profundo del mundo no es el Nilo ni el Amazonas: alcanza hasta 220 metros y alberga varias especies de peces sin ojos
- Política y deporte en la Guerra Fría: tres segundos de infarto en la final de básquet de las Olimpiadas de Múnich de 1972 entre USA y la URSS

El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, advirtió que la capital, Teherán, podría tener que ser evacuada debido a la escasez de agua, si no llueve antes de que termine el año.
"Si no llueve, tendremos que empezar a racionar el agua en Teherán entre finales de noviembre y principios de diciembre", dijo Pezeshkian en un discurso transmitido por la televisión estatal.
TE RECOMENDAMOS
INHABILITAN A DELIA ESPINOZA: CONGRESO AGRAVA CRISIS POLÍTICA | LA VERDAD A FONDO CON PEDRO SALINAS
PUEDES VER: Donald Trump se muestra dispuesto a levantar sanciones contra Irán tras pedido de Teherán
Una de las peores sequían en la historia de Irán
"Incluso si la racionamos y sigue sin llover para entonces, nos quedaremos sin agua y tendremos que evacuar ", añadió el mandatario que no precisó cómo sería la evacuación de la capital.
En la actualidad, la falta de precipitaciones afecta a todo Irán, aunque la megaciudad de más de 10 millones de habitantes es especialmente vulnerable.
El director de la empresa regional de agua, Behzad Parsa, advirtió a los medios estatales que solo quedaban dos semanas de agua en el principal embalse que abastece a Teherán.
Los niveles de agua en los embalses que abastecen a la capital han caído a su nivel más bajo en décadas, según Mohsen Ardakani, director general de la empresa provincial de agua que abastece a Teherán.
Piden a población ahorrar consumo de agua
"En los últimos seis meses, la población ha ahorrado un 10% de su consumo de agua", declaró en la televisión estatal.
"Si esta cifra alcanza el 20%, podremos garantizar una situación hídrica estable durante los próximos uno o dos meses, cuando vuelvan las lluvias", AHREGÓ.
Los meses de invierno en Teherán suelen traer lluvias y, a menudo, nieve.
La fuerte disminución de las precipitaciones y la reducción del caudal de las presas han agravado la crisis, ya que Irán se enfrenta a una de las peores sequías de las últimas décadas.
























