La vez que Albert Einstein fue invitado a ser presidente de Israel y rechazó la oferta: "Me complace y avergüenza"
La invitación fue extendida por el ministro David Ben-Gurión y enviada por el embajador israelí en EE. UU. en 1952 tras la muerte del presidente Chaim Weizmann.
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En 1952, tras la muerte del presidente Chaim Weizmann a los 77 años, Israel se vio en la necesidad de encontrar un sucesor. La nación con a penas cuatro años de establecerse no solo buscaba su estabilidad política, sino incentivar la inmigración de judíos. Por lo tanto, el Ministerio de Asuntos Exteriores israelí propuso varios nombres de figuras judías que pudieran cumplir con esta misión.
La invitación formal llegó en ese mismo año, cuando el gobierno de Israel propuso al reconocido físico Albert Einstein asumir la presidencia del país. Sin embargo, Einstein, conocido por su humildad y su enfoque en la ciencia, rechazó la oferta de manera rotunda. En su carta de respuesta, expresó que aunque se sentía "complacido" por la propuesta, también se sentía "avergonzado".
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¿Por qué invitaron a Albert Einstein para ser presidente?
La invitación fue impulsada por el entonces ministro David Ben-Gurión quien decidió volver a invitar a un científico al puesto. Luego, el embajador de Israel en Estados Unidos, Abba Eban, contactó a Einstein, quien vivía en el país desde 1933. El mensaje fue a través de una carta en nombre de Ben-Gurion.
"Israel es un Estado pequeño en dimensiones físicas", escribió. "Pero puede alcanzar la grandeza, ya que ejemplifica las más elevadas tradiciones espirituales e intelectuales que el pueblo judío ha establecido con sus mejores corazones y mentes, tanto en la antigüedad como en la actualidad", decía la carta.
La sorprendente respuesta de Einstein
Einstein, con entonces 73 años, respondió cortésmente y pareció complacido con la invitación, pero no quería embarcarse en la aventura. El científico argumentó que no tenía las habilidades requeridas para el puesto. "Me conmueve profundamente la oferta de nuestro Estado de Israel y, al mismo tiempo, me entristece y me avergüenza no poder aceptarla", manifestó.
"Me siento aún más afligido por estas circunstancias, ya que mi relación con el pueblo judío se ha convertido en mi vínculo humano más fuerte desde que tomé plena conciencia de nuestra precaria situación entre las naciones del mundo".
Una de las condiciones para ocupar el puesto de presidente era mudarse de Nueva Jersey, donde vivía y trabajaba en el Instituto de Estudios Avanzados de Princeton, a Israel.

Tres años después de la propuesta, el gobierno israelí emitió en 1968 un billete de 5 liras con su retrato en honor a Albert Einstein.
























