Más de 4,6 millones de mujeres en el Perú están atrapadas en el empleo precario
Según el INEI, más de la mitad de la fuerza laboral femenina (53%) está en situación de subempleo al percibir ingresos por debajo del mínimo y no alcanzar las horas de trabajo que requieren. La cifra supera ampliamente a la de los hombres (35%).
- Inversión de US$320 millones en Callao creará más de 6.000 empleos con el primer parque logístico sostenible del Perú
- Más de 1,4 millones de peruanos trabajan por las exportaciones: agro y minería lideran el empleo

Aunque el empleo adecuado en el Perú superó el 50% de la población ocupada, las cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) revelan que la precariedad laboral sigue marcando a millones de peruanos, sobre todo a las mujeres.
Escucha la noticiaTexto convertido en audio
Entre julio de 2024 y junio de 2025, la población económicamente activa (PEA)—es decir, todas las personas en edad de trabajar que tienen un empleo o que lo están buscando activamente— ascendió a 18 millones 393.400 personas, de las cuales 17 millones 410.900 tenían trabajo y 982.600 estaban desempleadas.
TE RECOMENDAMOS
Las TRES CLAVES para reactivar la economía del Perú: APP, OXI y fondos soberanos | #ECONOW
Dentro de los ocupados, 9 millones 484.700 accedieron a un empleo adecuado, mientras que 7 millones 926.200 —equivalentes al 43,1% de la PEA— permanecieron en situación de subempleo, es decir empleo precario.
El subempleo, que no siempre está vinculado con la informalidad, abarca a dos grupos. El primero es el subempleo por horas (o visible), que incluye a quienes trabajan menos de 35 horas a la semana, desean laborar más tiempo y están disponibles para hacerlo, pero no encuentran dónde.
El subempleo golpea más a las mujeres
El segundo es el subempleo por ingresos (o invisible), que agrupa a quienes, pese a trabajar más de 35 horas, reciben una remuneración menor al 50% del costo de la canasta básica familiar.
Recordemos que el valor de esta canasta, que representa el conjunto mínimo de bienes y servicios para vivir dignamente, es de S/454 por persona al mes. Para un hogar de cuatro integrantes, el ingreso mínimo requerido es de S/1.816 mensuales. Esto significa que una gran parte de los trabajadores subempleados convive con menos de S/908, lo que los condena a ingresos indignos.
Una de las mayores taras es la desigualdad de género. Mientras el 60,5% de los hombres ocupados accede a un empleo adecuado, en las mujeres la proporción cae a apenas 40,6%. Es decir, más de la mitad de la fuerza laboral femenina (53,0%), equivalente a más de 4,6 millones de mujeres, se encuentra atrapada en el subempleo, cifra muy superior a la registrada entre los hombres (35,1%).


El panorama tampoco es alentador para los jóvenes. En el grupo de 14 a 24 años, el 58% labora en condiciones de subempleo y solo 31% alcanza un empleo adecuado, lo que evidencia la dificultad de inserción laboral para las nuevas generaciones.
En paralelo, el desempleo se ubicó en 5,9% en el trimestre abril-mayo-junio, con una marcada diferencia entre el área urbana (6,8%) y la rural (1,7%).
A nivel de género, la tasa de desempleo femenino (7,2%) superó en 2,5 puntos a la masculina (4,7%). Según revela el INEI, quienes tienen una educación superior universitaria registran la mayor tasa de desempleo (7,0%), mientras que aquellos con primaria o menor nivel alcanzan solo 4,0%, lo que refleja un mercado laboral que no logra absorber a los profesionales calificados.
























