La Contraloría General de la República detectó hechos adversos en la distribución de más de seis mil canastas que realizó la Municipalidad Provincial de Chiclayo a las familias en condición de vulnerabilidad por el estado de emergencia por el coronavirus.
Según el reporte de avance, el ente de control señaló que el ayuntamiento no cuenta con la totalidad de los formatos de declaración jurada respecto a la recepción de canasta básica familiar que acredita la entrega de los productos a 6,203 hogares, lo que -afirma- afecta la transparencia.
Según el informe de avance, el ente de control señala que el 21 de abril de este año, la Subgerencia de Asistencia Social y Alimentaria el padrón priorizado para entrega de canastas en la que consigna 6,273 canastas, cuya distribución terminó el 29 de abril.
Asimismo indica que la MPCh remitió 421 formatos sobre la recepción de alimentos los días 21 y 22 de abril. Posteriormente, hizo lo mismo con 833 formatos correspondiente al 21, 22 y 23 del mismo mes.
En ese contexto, señala que la comuna no entregó los documentos que acredite la entrega de los alimentos del 24 al 29 de abril. Agrega, que la municipalidad informó que algunos funcionarios responsables de la distribución no alcanzaron los padrones.
También se verificó que los padrones de entrega de ayuda humanitaria no tienen la firma del alcalde Marcos Gasco y del representante vecinal o comunal, lo que también afecta el proceso.
Por su parte, la gerencia general de la comuna, informó que subsanarán las observaciones para evitar, lo que implica presentar documentación.