El 28 de julio de 2021, Pedro Castillo asumió la presidencia de Perú para el período 2021-2026 con la consigna de ser un gobierno de cambios y para restablecer el orden político que en los últimos meses se había perdido.
En aquel momento, la sesión comenzó a las 9.00 a. m. de la mañana en el Congreso. La presidenta de aquel entonces, María del Carmen Alva, tomó juramento a Castillo y le puso la banda presidencial. El presidente llevaba el tradicional sombrero cajamarquino y un terno oscuro con motivos andinos, y recibió los símbolos del poder del Estado, que lo acreditan como primer mandatario de la nación por el período 2021-2026.
“Juro por Dios, por mi familia, por los campesinos, por los pueblos originarios, por los ronderos, pescadores, profesionales, niños, adolescentes, que ejerceré el cargo de presidente de la República en el periodo 2021-2026. Juro por los pueblos del Perú, por un país sin corrupción y por una nueva constitución”, dijo Castillo en su discurso.
Ahora, Pedro Castillo cumple un año de turbulento Gobierno con baja popularidad. El país está golpeado por la inestabilidad política, económica y social, mientras el presidente acumula investigaciones por tráfico de influencias, patrocinio ilegal, organización criminal, entre otras; y el Congreso debate abiertamente sobre su destitución.
Así tituló el diario Clarín su nota respecto al Gobierno del líder sindical, y señaló que Castillo “solo intenta sobrevivir a un Congreso que se esfuerza por echarlo”. De igual forma, en el artículo se mencionan las investigaciones abiertas por corrupción que se caen sobre el mandatario, las preocupaciones de la población y las falencias que ha tenido a lo largo de su gestión.
Foto: captura / Clarín
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El canal alemán DW realizó un informe donde afirmó que “la única noticia positiva en estos días es haber conseguido asegurar, a duras penas, su supervivencia política, y mantenerse hasta ahora en el cargo como presidente del Perú. Sin embargo, “las malas noticias abundan: su Gobierno vive en crisis permanente por la vertiginosa entrada y salida de funcionarios incompetentes, y a las críticas por una gestión miserable se suman acusaciones de corrupción cada vez más serias”.
“Ha tenido hasta el momento 57 cambios de ministros, ha designado personas sin ningún tipo de perfil y experiencia en diferentes cargos públicos”, indicó el analista político Alonso Cárdenas para DW.
Foto: captura / DW
Así tituló el famoso diario El Espectador de Colombia. Consultó con especialistas en el tema y dijo que el presidente “está concentrado exclusivamente en esquivar los ataques políticos y no en gestionar un país”. Igualmente, hizo hincapié en las investigaciones preliminares de Castillo y los más de 50 nombramientos durante su gabinete en “un país que se avecina a una crisis alimentaria”.
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El Diario Las Américas hizo una cronología de los momentos cruciales de la gestión del presidente y consultó con especialistas en el tema. Además, hizo una paralelismo entre lo que ocurre con Castillo y el panorama de los exmandatarios Pedro Pablo Kuczynski y Martín Vizcarra, quienes lograron sobrevivir a una primera moción de destitución, pero no a una segunda en 2018 y 2020, respectivamente, en medio de enfrentamientos con el Congreso y muchas denuncias de corrupción.
“A los tres meses era evidente que era un presidente inepto y con una vocación por la corrupción muy grande”, dijo el analista y economista Augusto Álvarez Rodrich.
Foto: captura / Diario Las Américas
El medio estadounidense CNN, por su parte, señaló lo especial que es el mandato de Castillo: “es el único presidente en funciones en la historia de Perú que ha sido investigado”. Indicaron, además, las 5 investigaciones en su contra por tráfico de influencias, patrocinio ilegal, organización criminal, entre otras.
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