El informe de una comisión del Senado de Brasil será presentado el miércoles 20 de octubre y pedirá que el presidente Jair Bolsonaro sea acusado por 11 crímenes, entre ellos “homicidio masivo”, debido a su falta de gestión frente a la pandemia por COVID-19, que ya dejó más de 600.000 muertos en el gigante sudamericano. El mandatario habría bloqueado los intentos de su país por comprar vacunas con tal de que se expanda el virus y lograr la “inmunidad de rebaño”.
La pericia de la Comisión de Investigación Parlamentaria del Senado (CPI en portugués) fue dada a conocer este martes 19 por El País y The New York Times. El informe legislativo será puesto a votación el 26 de octubre y, de prosperar, pasará a la Fiscalía.
Jair Bolsonaro, quien contrajo el coronavirus en julio de 2020, es muy criticado por su gestión de la crisis sanitaria en su país. Foto: composición/AFP-EFE
“Muchas de estas muertes eran evitables”, dijo Renan Calheiros, principal autor del informe, a The New York Times. “Estoy personalmente convencido de que él (Bolsonaro) es responsable de la escalada de la matanza”, sostuvo el senador sobre las 300.000 muertes que esta investigación adjudica al mandatario.
La oficina presidencial no respondió sobre este informe senatorial porque lo considera políticamente motivado. En mayo, Bolsonaro calificó de “bochorno” a esta investigación, cuya comisión desde ese entonces recibió testimonios de decenas de expertos y miembros del Gobierno. Días después, un grupo de senadores aseguró haber “recibido diversas amenazas”.
El líder de ultraderecha también sería responsable de “genocidio de indígenas”, reseñó El País, por su “intención de someter a ese grupo específico de población al riesgo de contagio”. Junto con Bolsonaro, la investigación del Senado pide procesar a 72 personas por 24 crímenes, entre ellos a tres hijos del presidente y otras personas ligadas al Gobierno.
Cuestionado. Las inexactitudes del discurso de Jair Bolsonaro ante las Naciones Unidas indignaron a los brasileños. Foto: EFE
El informe del Senado sostiene que Jair Bolsonaro obstaculizó los intentos estatales por conseguir vacunas, ya que su gestión estaba más concentrada en conseguir la “inmunidad de rebaño”. Incluso, este 14 de octubre, el presidente recalcó que no recibirá fármaco alguno contra el coronavirus, ya que sus “niveles de inmunidad están por las nubes”. En su caso, la vacunación “está fuera de lugar”, señaló el líder de ultraderecha.
Bolsonaro promovió tratamientos sin eficacia probada frente al virus. Estas políticas incluyeron la administración de cloroquina e ivermectina. “En tiempos normales, sería un ejemplo despreciable de charlatanería pseudocientífica. No obstante, en medio de una pandemia global, colaboró para generar una monstruosa tragedia en la que miles de brasileños fueron sacrificados”, sostiene el reporte, según El País.