Un hombre enfurecido, porque las enfermeras hacían caso omiso a sus pedidos, no dudó en incendiar la cama del hospital donde estaba internado por problemas respiratorios. John David King tomó una bolsa y la encendió lanzándolo contra la cama del nosocomio AdventHealth New Smyrna Beach de Florida, Estados Unidos.
El sujeto de 75 años declaró ante las autoridades que llamó a las enfermeras en varias oportunidades para que le den su ropa, pero al notar que nadie lo tomaba en cuenta decidió encender la cama del cuarto que compartía con otro paciente.
La Policía de New Smyrna Beach llegó al lugar el último sábado y detuvo a King, quien actualmente se encuentra en la cárcel del condado Volusia y tendrá que pagar una fianza de 15 mil dólares. Además, el hombre tendrá que hacerse responsable de los daños causados a la infraestructura del centro de salud.
Las autoridades de Florida acusaron al septuagenario de ser el autor de un incendio premeditado en segundo grado y de haber ocasionado daños a un inmueble público.
Su compañero de cuarto, Samuel Moreno, declaró al Nuevo Herald que John caminó en dirección a su cama y trató de prenderle fuego, pero lo persuadió de que no hacerlo. Sin embargo, el enfurecido anciano ignoró su petición por lo que Moreno presionó varias veces el botón para llamar a las enfermeras.
Una de las asistentes del centro de salud identificada como Jessie Guarini llegó hasta la habitación y se dio con la sorpresa de que la cama ardía en llamas.
Guarini llamó a sus colegas: “¡Fuego! ¡Hay un fuego!” y llamó al 911. Otra enfermera, Marrie Koch, de 27 años, usó un extinguidor para sofocar las llamas que envolvían la cama que, según el hospital, “es una pérdida total”.
Durante su manifestación, King aseguró que prendió fuego intencionalmente, pero su propósito nunca fue dañarse o causar un contratiempo a alguien más. Un portavoz del hospital dijo que el costo para sustituir la cama destrozada es $4,000.