Las graves afectaciones socioambientales ocasionadas por el derrame de 6.000 barriles de petróleo por Repsol podrían significar una oportunidad económica para la empresa. Increíblemente, la petrolera, que ya originó un segundo derrame de crudo, estaría en capacidad de acceder a la deducción de impuestos por los gastos que realizó en su plan de contención, además de la remediación ambiental. Así lo explicaron especialistas consultados por este medio.
La contaminación generada por la refinería La Pampilla (Ventanilla) el 15 de enero ya llegó por lo menos hasta la provincia de Huaura, aunque se podría haber extendido hasta Chancay. El plan de contención que Repsol presentó en 2015 incluye la posibilidad de indemnizar a terceras personas que se vieran afectadas. Miles de pescadores y operadores de turismo han detenido sus actividades a lo largo de la zona contaminada. Aún no se sabe cuáles son las consecuencias en la salud de los pobladores.
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Directora de la OEFA señaló que el plazo de la primera medida culminó el último 25 de enero. Foto: Gerardo Marín/GLR
De acuerdo con la normativa vigente, las multas que las autoridades impongan sobre Repsol no aplican para ser deducibles de impuestos. Sin embargo, las acciones dentro del plan de contingencia, como la entrega de víveres a damnificados, sí podrían calificar para esta ventaja tributaria.
“No hay ninguna norma tributaria que prohíba la deducción de impuestos. Entonces lo que han venido haciendo las empresas es hacerlos deducibles aplicando las reglas generales del Impuesto a la Renta”, explicó a La República el abogado tributarista Carlos Trinidad. Los responsables de la petrolera están en capacidad de aprovechar “vacíos de la ley del impuesto a la renta, la falta de aplicación de la ley ambiental y los estándares ambientales internacionales por parte de los funcionarios tributarios”, explicó el experto.
Jorge Picón, también abogado tributarista, coincidió en que las acciones del plan de contención de Repsol serían deducibles de impuestos. “Repsol, como cualquier otra empresa, si es que tiene algún tipo de accidente —lo que el seguro no cubra—, aquello que gaste de su bolsillo y no le sea reembolsado por un seguro, yo entendería que sería deducible de impuestos para calcular la utilidad”, sostuvo Picón.
Carlos Trinidad es autor del informe Derrames petroleros y deducciones de impuestos, publicado en 2021 por CooperAcción. En este documento, el abogado detalla que el Tribunal Fiscal (TF) —última instancia administrativa para resolver controversias entre contribuyentes y la Administración tributaria— emitió 12 resoluciones donde acepta que empresas operadoras de petróleo en la Amazonía deduzcan impuestos por entrega de víveres tras derrames de petróleo.
Tribunal Fiscal aceptó en 12 ocasiones que empresas de hidrocarburos causantes de derrames en la Amazonía acceden a deducción de impuestos. Foto: Fiscalía de Loreto
Trinidad cuestiona tales resoluciones porque “provienen de un derrame de petróleo, de absoluta responsabilidad de las empresas operadoras”. Señala que, de acuerdo con el “principio de internalización de costos ambientales”, de naturaleza constitucional, “los costos de implementación de un plan de contingencia deberían ser asumidos por ellos (operadores de hidrocarburos)”.
“Un ciudadano cualquiera no puede tener la seguridad (de que Repsol deducirá impuestos) porque esa información es confidencial debido a la reserva tributaria, pero la existencia de estos antecedentes jurisprudenciales es un claro indicio de cómo las empresas vienen actuando y cómo el Estado viene permitiendo que sean deducibles”, apuntó Trinidad Alvarado.
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La remediación ambiental es un proceso que permite reducir las partículas de hidrocarburos que no son visibles hasta niveles que no presenten riesgo para las personas y el ecosistema, según informó Profonanpe. Estas acciones se toman luego de la primera limpieza que se viene realizando, y también serían deducibles de impuestos por parte de Repsol.
“Utilizando los mismos argumentos que utiliza el TF para permitir la deducción de los planes de contingencia, tranquilamente se puede deducir la remediación”, sostiene Carlos Trinidad. Las razones de este tribunal “son tan peligrosas que permitirían justificar la deducción del derrame”, advierte el experto en tributación y derecho ambiental.
El abogado Jorge Picón también considera que Repsol podría deducir impuestos a partir de la remediación posterior que realizará en las zonas afectadas. “La empresa no se dedica a derramar petróleo en el mar, pero si es dado que ha ocurrido y tiene que pagar indemnizaciones y tiene que hacer gastos, se deducirán para cobrar su utilidad”, subraya el socio del estudio de abogados Picón y Asociados.
La deducción de impuestos a la que podría acceder Repsol tras el desastre ambiental que causó significaría que el Estado recibirá menos impuesto a la renta. “Es gravitante. No hay una investigación muy profunda sobre esto debido a la falta de transparencia tributaria, pero es realmente injusto”, sentencia Trinidad.
Repsol también podría deducir impuestos tras sus acciones de remediación ambiental. Foto: EFE
“El efecto financiero es ese: al ser deducibles, el Estado no recibe ese monto y lo subsidiamos todos con nuestros impuestos”, aclara el experto en tributación. Repsol está en condiciones de “poder deducir gastos que en ninguna otra parte del mundo podría deducir”, remarca Trinidad, para quien este derrame de petróleo demostró que la regulación ambiental peruana no es tan restrictiva como propugnaban ciertos sectores.
El especialista Jorge Picón confirmó que, en su experiencia, ha visto casos de ventajas tributarias en el sector minero. “Efectivamente, se han deducido los pagos que se hacían a las poblaciones o eventualmente las indemnizaciones, o las obras que tenía que hacer la empresa para poder hacer la remediación ambiental”, explicó.
En los casos en que la empresa es responsable del daño ambiental, no debería ser posible la deducción de impuestos, considera Trinidad. “Lo que se puede hacer es exigir a Sunat que fiscalice”, continúa. “Sunat tiene todos los elementos de juicio para, en el caso de Repsol, verificar que no estén deduciendo los impuestos. Esta entidad cuenta con suficiente respaldo de las normas ambientales para evitarlo”, alertó.