Una prueba de calificación de un motor Raptor 2 de la empresa aeronáutica SpaceX terminó en una explosión registrada por cámaras de seguridad en las instalaciones de McGregor en Texas.
El incidente, ocurrido el jueves a las 4.15 p. m. (hora local) envolvió el banco de pruebas en llamas. A pesar de la magnitud del evento, es poco probable que afecte el próximo cuarto lanzamiento de prueba del megacohete Starship.
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Según el portal Gizmodo, la causa de la explosión en la sede de pruebas de SpaceX habrían sido gases naturales; específicamente, señalan al metano y oxígeno como los involucrados en la detonación. El motor incendiado Raptor de SpaceX utiliza metano líquido (CH₄) como combustible y oxígeno líquido (LOX) como oxidante, por lo que no se descarta que una fuga o anomalía en la combustión de estos gases podría haber causado una mezcla explosiva, lo que resultó en la bola de fuego difundida a través de redes sociales.
Los motores Raptor se usan en las naves espaciales creadas por SpaceX. Foto: TeslaProNews
La empresa SpaceX, creada por el inversor Elon Musk, aún no ha emitido un descargo respecto al incidente y dejó en duda si la explosión causó daños significativos al motor Raptor o al banco de pruebas ubicado en la ciudad de McGregor. Sin embargo, anomalías como esta son comunes durante las pruebas de calificación. Dichas pruebas son esenciales para garantizar que los motores cumplan con los estándares de rendimiento y seguridad antes de ser incorporados a cohetes operativos.
Actualmente, la empresa aeronáutica está probando los motores Raptor 2, que presentan mejoras en rendimiento, eficiencia y confiabilidad en comparación con sus predecesores. A pesar del incidente, es poco probable que afecte el próximo lanzamiento de prueba del Starship, ya que SpaceX sigue avanzando en el desarrollo de sus motores y tecnologías.
La nave espacial Starship es una de las más poderosas. Foto: SpaceX
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SpaceX realiza pruebas exhaustivas de sus motores en las instalaciones de McGregor, Texas. Entre estas, se incluyen pruebas estáticas para medir el rendimiento del motor en condiciones controladas. Gracias al desarrollo de pruebas, los encargados de construir las naves espaciales pueden asegurar que los motores cumplan con los estándares de rendimiento y seguridad antes de su uso en misiones al espacio.
El desarrollo del motor Raptor, que utiliza tecnologías avanzadas como la impresión 3D, hoy en día enfrenta desafíos técnicos significativos. Por ello, estas pruebas permiten a SpaceX realizar ajustes y mejoras continuas. Este riguroso proceso de validación es crucial para el éxito de misiones futuras, incluyendo el lanzamiento de la aeronave Starship.