Sociedad

Auge minero amenaza los ríos del Perú y de otros 48 países del mundo

Reciente investigación ha determinado que unos 59.000 kilómetros de ríos tropicales han sufrido daños. El estudio muestra un aumento drástico de la minería fluvial desde el 2000 por repunte de los precios del oro.

La biodiversidad del Perú continúa siendo afectada por la minería informal e ilegal. Foto: difusión
La biodiversidad del Perú continúa siendo afectada por la minería informal e ilegal. Foto: difusión

Unos 59.000 kilómetros de ríos tropicales del Perú y de otros 48 países del mundo están siendo arrasados, entre otras cosas, por la extracción del oro. Los cauces han perdido agua por la actividad minera ilegal, que está destruyendo a su paso la tierra, la flora y la fauna. Una reciente investigación evidencia, de manera aterradora, grandes heridas que están afectando gravemente la biodiversidad del planeta.

La minería y explotación ilegal de recursos, en este caso del oro y otros materiales, está presente en 49 países, según el estudio realizado por un equipo de científicos del Centro de Innovación Científica Amazónica (Cincia), Dartmouth College y Wake Forest University.

De acuerdo al Ministerio de Energía y Minas (Minem), la minería ilegal es aquella que no dispone del correspondiente título minero vigente o de la autorización del titular de la propiedad en la que se realiza y que, además, no cumple con al menos uno de los requisitos exigidos por la ley: la licencia ambiental, las normas laborales y ambientales de seguridad o de salubridad industrial.

Tampoco tiene la capacidad técnica necesaria o el pago de regalías o de las contraprestaciones económicas exigidas para el aprovechamiento de los recursos naturales.

El estudio publicado en la revista científica Nature, llamado 'A Global Rise in Alluvial Mining Increases Sediment Load in Tropical Rivers', ofrece una visión global de cómo la extracción de minerales está dañando los ríos desde América del Sur hasta Asia.

Los expertos de Cincia y Wake Forest trabajaron en esta investigación junto con el autor principal, Evan Dethier, profesor de Occidental College, quien colaboró mientras investigaba en Dartmouth College.

Remoción de tierra en ríos altera su cauce regular. Foto: difusión

Remoción de tierra en ríos altera su cauce regular. Foto: difusión

Sedimentos venenosos

Desde el espacio, a más de 700 kilómetros de altura, los satélites revelan el crecimiento de este cáncer que, literalmente, se está comiendo la tierra y los ríos. Un cáncer que se ha disparado en los últimos cinco años, de la mano de miles de dragas y retroexcavadoras, que en cuestión de meses son capaces de convertir en un desierto de arenas muertas y lagunas de mercurio áreas más grandes que cualquier centro urbano.

La minería fluvial implica grandes excavaciones en los ríos tropicales, lo que a menudo conlleva la deforestación de áreas circundantes y un aumento en la erosión del suelo.

Una consecuencia significativa de esta actividad es el vertido de grandes cantidades de material excavado directamente en los ríos, perturbando gravemente la vida acuática en los ecosistemas cercanos y aguas abajo.

Estos sedimentos inorgánicos se transportan por los ríos como "sedimentos en suspensión", propagando los efectos perjudiciales de la minería aguas abajo. Investigaciones previas han demostrado que estos sedimentos pueden también transportar toxinas, incluyendo mercurio, utilizado en los procesos de minería fluvial.

Peligro en Madre de Dios

Esto no solo afecta la calidad del agua, sino también plantea riesgos significativos para la salud humana y el medio ambiente. El Centro de Innovación Científica Amazónica (Cincia) viene realizando desde el año 2016 diversos estudios acerca del impacto de la minería ilegal en Madre de Dios, una de las regiones más afectadas por esta actividad en el Perú.

Esta problemática ha planteado la urgente necesidad de analizar los efectos de la minería en un contexto más amplio y global. Fue precisamente esta necesidad la que originó que Cincia plantee a investigadores de Dartmouth College y Wake Forest University, un estudio a nivel global, buscando conocer el impacto de la minería no solo en la Amazonía peruana, sino también en otros países.

"Este estudio eleva el problema a una escala global", indicó Miles Silman, profesor de Biología de Wake Forest y uno de los autores del estudio.

Madre de Dios es la región peruana más afectada por la minería ilegal. Foto: difusión

Madre de Dios es la región peruana más afectada por la minería ilegal. Foto: difusión

Hallazgos del estudio

El equipo de científicos estudió la minería fluvial en los trópicos desde 1984 hasta 2021, usando datos satelitales y fuentes públicas.

Encontraron que hay 400 zonas mineras en 49 países, principalmente cerca del Ecuador. El estudio reveló un aumento significativo de la minería después del año 2000, relacionado con la crisis financiera global. Evaluaron cómo la minería afecta la cantidad de sedimentos en 35.000 km de ríos tropicales, alrededor del 6% de estos ríos.

Los investigadores usaron algoritmos informáticos para analizar enormes conjuntos de datos. 'Impacto en la vida acuática: el estudio' evaluó cómo la minería afecta a los peces. Descubrieron que la turbidez de los ríos afectados supera las pautas de protección de peces el 90% de los días, lo que dificulta a los peces cazar y evita su reproducción.

Soluciones futuras

Sin embargo, el estudio ofrece también esperanza para encontrar soluciones al compartir lecciones entre países. Luis Fernández, director ejecutivo de Cincia y coautor del estudio, manifestó que esta investigación “crea conciencia y presión para resolver problemas”.

El proyecto fue financiado por la National Aeronautics and Space Administration de los Estados Unidos (NASA), el Instituto Neukom de Ciencia Computacional de Dartmouth College, y Cincia-Acierta, una alianza entre Cincia, la Universidad de Wake Forest University y la Agencia de Desarrollo Internacional de los Estados Unidos (Usaid).