Sociedad

Revelan modus operandi de José Hernández, sujeto que pedía contenido íntimo a menores por Free Fire

A través de una serie de investigaciones, se pudo conocer el patrón cibernético de engaño y chantaje por parte del hombre que acosaba a menores de edad mediante el juego online Free Fire. Hoy, este sujeto es el primer sentenciado con pena privativa de la libertad por captar a niñas con fines sexuales.

El sujeto captaba víctimas menores de edad entre los 8 y 16 años. Foto: Panorama
El sujeto captaba víctimas menores de edad entre los 8 y 16 años. Foto: Panorama

Luego de que se conociera el caso del acosador cibernético a menores de edad José Hernández Cerruche, quien captaba a sus víctimas con fines sexuales mediante el conocido juego Free Fire, un reportaje periodístico del dominical "Panorama" reveló el perfil de este sujeto, quien ahora se encuentra sentenciado por la Fiscalía de Ciberdelincuencia de Lima Centro por 6 años y 8 meses con pena privativa de la libertad tras incurrir en delito.

Modus operandi

Este ciberacosador, que operaba a través del Free Fire, logró obtener fotos y videos íntimos de al menos dos menores de edad, quienes fueron víctimas de un patrón coordinado entre engaños y chantajes por este sujeto.

En primer lugar, el agresor, durante las partidas de este videojuego, utilizaba un nombre falso para captar a las menores de edad. Él se hacía llamar 'El mejor amigo'.

Acto seguido, buscaba el contacto online con niñas y adolescentes entre 8 y 16 años de edad. Una vez que lograba ganar su confianza, procedía a pedirles contenido sexual a través del juego. Al no obtener en un inicio lo que solicitaba, empleaba el chantaje y la manipulación.

Sin embargo, lo más resaltante de esta investigación realizada por la Policía Nacional en colaboración con el testimonio de la madre de una de las menores, es que José Hernández Cerruche transfería dinero a este videojuego para tener 'diamantes', una suerte de bonus con los que un usuario podía tener ciertos beneficios, por ejemplo, crear salas privadas de interacción.

De esta manera, Hernández Cerruche captaba a sus víctimas hasta conseguir sus números telefónicos y así empezar una conversación vía WhatsApp. Finalmente, para evitar ser descubierto, este sujeto exigía a las menores borrar los chats para que no queden registros del acoso. Incluso, el agresor tenía un software que eliminaba todos sus movimientos en su celular.

Esta modalidad de ilícitos se conoce como child grooming, o en español, ciberacoso. Un patrón que ya se ha vuelto común en muchos acosadores y pederastas a nivel mundial.

Canales de ayuda

Si eres o conoces a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, comunícate de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.

Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).