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Política

En casa de Sada Goray se hizo informe para entregarle 90 hectáreas del Estado

En bandeja. Desesperada porque la Superintendencia Nacional de Bienes Estatales rechazó su pedido para que le reconozca como suyo un predio en Chilca, Sada Goray recurrió a Salatiel Marrufo, quien cambió a los funcionarios. Así consiguió “sanear” terreno que había vendido en US$54 millones.

Fue su examiga, exconfidente y exempleada Pilar Tijero quien delató ante la Fiscalía a Sada Goray sobre el terreno de Chilca que vendió a Centenario por US$54 millones. Foto: Félix Contreras/La República
Fue su examiga, exconfidente y exempleada Pilar Tijero quien delató ante la Fiscalía a Sada Goray sobre el terreno de Chilca que vendió a Centenario por US$54 millones. Foto: Félix Contreras/La República

El pago de sobornos que hizo Sada Goray Chong a Salatiel Marrufo Alcántara no solo comprendía el copamiento del directorio del Fondo Mivivienda. También incluía tener bajo control la Superintendencia Nacional de Bienes Estatales (SBN), especialmente la Dirección de Gestión del Patrimonio Estatal (DGPE). Es la DGPE la que rechazó en reiteradas oportunidades la solicitud de Goray para que reconociera una supuesta superposición de un terreno del Estado en Chilca sobre 90 hectáreas que la empresaria reclamaba que eran de su propiedad.

Sada Goray le pidió a Salatiel Marrufo que le solucionara el problema porque estaba en juego un extraordinario negocio. Había adquirido el predio por US$18 millones 520 mil y luego lo revendió a Centenario Desarrollo Urbano (CDU), del Grupo Romero, por US$54 millones. Si no conseguía la resolución que deseaba de la SBN, ¡perdía todo lo invertido!

Fuentes de CDU confirmaron a La República que la inmobiliaria adquirió a Sada Goray y su familia las 90 hectáreas de Chilca de la siguiente forma:

― El 29 de diciembre del 2019, 30 hectáreas por US$15 millones.

― El primero de febrero del 2021, las otras 60 hectáreas por US$39 millones.

Las fuentes de CDU también aceptaron que siempre estuvieron enterados de que Sada Goray debía resolver el problema de la supuesta superposición de linderos del terreno de Chilca, por lo que en el segundo contrato se le dio como plazo máximo el 14 de enero del 2022 para que saneara totalmente el predio. De lo contrario, no le abonaban las cuotas previstas y le aplicaban una penalidad de US$1.000 por cada día que pasaba.

Presionada por la fecha de expiración, recurrió a Salatiel Marrufo, quien le recomendó lo mismo que hizo en el caso del Fondo Mivivienda: tomar el control de la SBN mediante la designación de funcionarios recomendados por Goray para que emitieran resoluciones favorables.

Sada Goray: su amiga Pilar Tijero confirma maniobras de la empresaria

En sus declaraciones como aspirante a colaboradora eficaz, Pilar Tijero Martino hizo una tremenda revelación. Afirmó que su íntima amiga y exclienta —Tijero trabajó para Goray en su empresa Marka Group— influyó en la designación de la titular de la SBN, Cyntia Rudas Murga, de la directora de Gestión de Patrimonio Estatal, Marina Subiría Franco, y de la asesora de esta, Flor Olivera Orellana.

Pilar Tijero, prima de Mauricio Fernandini. Foto: difusión

Pilar Tijero, prima de Mauricio Fernandini. Foto: difusión

Las tres tuvieron un papel clave en la formulación de las resoluciones que le dieron la razón al reclamo de Sada Goray, por lo que las 90 hectáreas de Chilca fueron revertidas a favor de la empresaria que pagó S/4 millones en coimas a Salatiel Marrufo.

Pero lo más sorprendente de todo es que Pilar Tijero relató que el estudio técnico en que se basó la SBN para favorecer a Sada Goray ¡fue redactado en la sala de su residencia, en Santiago de Surco!

Y por si fuera poco, Tijero añadió que entre los que intervinieron en la elaboración del documento se encontraba la abogada Flor Olivera Orellana, socia de Goray en la empresa Nuevo Chiclayo, que forma parte del conglomerado Marka Group. Esta compañía es titular del proyecto Chiclayo Bonito, cuyo financiamiento consiguió Goray mediante el Fondo Mivivienda bajo su control. Uno de los socios de este proyecto fue el empresario Fernando Pazos Huayamares. Flor Olivera trabajó para algunas de sus empresas.

Así lo declaró Pilar Tijero, la ahora examiga, exconfidente y exempleada de Sada Goray:

“En febrero del 2022, Sada Goray comentó a Pilar Tijero que debían colocar un asesor en la SBN para que formule informes a favor de ella y de esa forma pueda ser favorecida en la resolución. Es así que en dicho mes contratan a Flor Olivera como asesora externa de la SBN, quien tenía vínculos con Fernando Pazos, ya que era abogada interna de sus empresas. Además, (Olivera) era directora junto con Sada Goray en la empresa Nuevo Chiclayo, de la cual el gerente general era Fernando Pazos. Dicha empresa tenía el proyecto inmobiliario Chiclayo (Bonito) (…). Como asesora externa, Flor Olivera se encargó de realizar el informe técnico a favor de Sada Goray”.

Al quedar en evidencia que estaba relacionado con Sada Goray y Flor Olivera, La República entrevistó a Fernando Pazos (21.11.2022) y este las instó a que dijeran la verdad. “Lo que podrían haber hecho Sada Goray y Flor Olivera no me ha favorecido en nada. Incluso de las inversiones que hice, no he recibido ni un sol”, dijo. Precisó que dejó de trabajar con Olivera desde 2017.

Pilar Tijero detalló cómo se armó el “informe técnico” que luego presentaría Flor Olivera como “asesora” de Marina Subiría. Así lo explicó Tijero, según la transcripción del informe fiscal sobre el caso:

“Quiero precisar que el informe técnico fue elaborado previamente por Ítalo Arbulú (Ortega, gerente general de Marka Group) y Sada Goray en la casa de Sada Goray, lo cual fue observado por Pilar Tijero Martino. Sada Goray comenta a Pilar Tijero que debía colocar una persona de su confianza como directora de Gestión Patrimonial (DGP) de la SBN, ya que dicho funcionario era quien debía firmar los documentos para obtener la superposición de linderos y medidas perimétricas en sus terrenos”.

Exconfidentes. A la izquierda, Pilar Tijero Martino y la empresaria Sada Goray Chong. Foto: difusión

Exconfidentes. A la izquierda, Pilar Tijero Martino y la empresaria Sada Goray Chong. Foto: difusión

Efectivamente, Flor Olivera Orellana simuló haber confeccionado un sesudo análisis técnico dándole la razón al reclamo de su socia y amiga Sada Goray, y la directora de Gestión del Patrimonio Estatal de la SBN, Marina Subiría, emitió las resoluciones para que las 90 hectáreas de Chilca fueran reconocidas como propiedad de la dueña y señora de Marka Group.

Fue así que Sada Goray consiguió el “saneamiento” que le exigió Centenario Desarrollo Urbano para completarle el pago de los US$54 millones por las 90 hectáreas.

Lo relatado por Pilar Tijero Martino en realidad es una confirmación de lo que había declarado el operador del régimen de Pedro Castillo, Salatiel Marrufo Alcántara. Recién cuando fue detenido, reveló que Sada Goray le pidió que lo ayudara a resolver el problema que tenía con la Superintendencia Nacional de Bienes Estatales (SBN). Marrufo le contestó que la única manera de hacerlo era relevando a los funcionarios que se oponían a sus deseos.

Sada Goray: Salatiel Marrufo brinda su versión

“(Marrufo) reconoce a la persona de Cyntia Rudas Murga (exsuperintendente nacional de Bienes Estatales). En el año 2021, la señora Sada Goray le comenta (a Marrufo) que tenía un problema de un terreno de su propiedad en Chilca con la SBN. Y le pide a Salatiel Marrufo que la ayude porque necesitaba solucionarlo; y Marrufo ya se sentía comprometido porque ya había recibido dinero por parte de Sada Goray por (haber conseguido) la firma del convenio entre Fondo Mivivienda y Marka Group. Por lo que le indicó directamente a Cyntia Rudas Murga para que se encargue de resolver ese asunto (…). Posterior a ello, Cyntia Rudas Murga le pidió al director de Gestión Patrimonial de ese tiempo para que haga las gestiones necesarias y poder ayudar a Sada Goray.  Y como estos no lo hicieron, fueron despedidos. (...) (Entonces), Sada Goray le dijo a Marrufo que tenía una abogada que podía hacer un informe que puede demostrar que sí era viable su pedido. Entonces, le dio el currículum de la abogada Flor Olivera a Salatiel Marrufo y este se lo entregó a Cyntia Rudas, quien la contrató como asesora externa para que pueda hacer los informes y documentos de gestión necesarios que les permita favorecer a Sada Goray”.

Fueron las declaraciones de Pilar Tijero Martino las que influyeron decisivamente en la decisión del juez Raúl Justiniano Romero de ordenar la detención de Sada Goray y otros cuatro implicados, y de no incluir en la medida a la examiga, exconfidente y exempleada de la empresaria inmobiliaria Sada Goray.

Fuentes relacionadas con la defensa de Sada Goray señalaron a La República que Pilar Tijero debe probar lo que ha dicho, ya que ha relatado hechos que no se ajustan a la verdad: “Busca la colaboración eficaz con mentiras. Cuando se inicien los actos de corroboración, quedará en evidencia que sus dichos son incorrectos”.

Fiscalía sospecha de una simulación

Al estallar el escándalo de corrupción que protagoniza Sada Goray, el 16 de enero de este año, Marka Group comunicó que la empresa Aalto Gestión Inmobiliaria, representada por Gonzalo Bedoya Robinson, “adquirió el 100% de las acciones representativas de capital social” y asumió la gestión de los 8 proyectos contratados con el Fondo Mivivienda”.

Sin embargo, el 16 de mayo de este año, Sada Goray cambió de nombre a Marka Group US, que inscribió en Florida (EE.UU.), y le puso Aalto US. Inc. Para la Fiscalía, la supuesta compra de las acciones de Goray sería una simulación. Sigue siendo la propietaria.

Confabuladas

Arriba, Flor Olivera Orellana, la “asesora” de Marina Subiría (al centro), nombrada por Cynthia Rudas (abajo). Las tres ayudaron a Sada Goray a “sanear” en la SBN terreno de Chilca.

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Fundador y jefe de la Unidad de Investigación. Estudió en la UNMSM, ha culminado una Maestría en su especialidad y enseña Periodismo de Investigación en la UPC. Es integrante del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés). Es corresponsal del diario argentino Clarín y de la revista mexicana Proceso.