Wilfredo Oscorima: entre las investigaciones y la paralización de su gestión
Enfoques. Dos consejeros regionales consideran que el caso Rolex complica aún más a la gestión regional que ya andaba mal. La asociación de familiares de víctimas del 15 de diciembre plantea ir por la revocatoria. Y Alex Flores observa una confesión de parte en el silencio guardado.
“El silencio que guarda es señal de culpabilidad”
Alex Flores Ramírez, congresista por Ayacucho
Wilfredo Oscorima no ha respondido ante la justicia ni ante la Comisión de Fiscalización del Congreso. Ese silencio es señal de culpabilidad. El que nada debe nada teme. El gobernador no ha esclarecido sobre el supuesto préstamo de los relojes Rolex a la presidenta Dina Boluarte. Tampoco explica cómo recibió más presupuesto o si, en realidad, fue una contraprestación.
Desde el Congreso hubo un primer acuerdo de la Comisión de Fiscalización para solicitar facultades de investigación para ahondar en este caso, pero fue bloqueado con una reconsideración. Claramente hay un acuerdo entre el Gobierno y determinados grupos que actúan como bancadas oficialistas. No dejan que el Congreso cumpla con su rol de control político.
Aquí es claro que existe una trama de soborno y prebendas, y esto debe ser investigado por el Congreso a nivel político, al margen de la investigación fiscal, para determinar posibles responsabilidades, incluyendo la incapacidad moral.
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Pero lo que ha ocurrido desde el Congreso es un blindaje a Dina Boluarte y a su socio Wilfredo Oscorima. Y es muy preocupante esta situación. Anteriormente, esas bancadas blindaron a Dina Boluarte por las muertes que hubo durante las protestas sociales. Ahora están blindando un acto de corrupción al más alto nivel.
“Las denuncias terminan afectando la actual gestión”
Maritza Cayampi Espillco, consejera de Ayacucho
Estamos viviendo una situación muy lamentable, porque ha sido involucrada la gestión del Gobierno Regional de Ayacucho. Antes de las denuncias difundidas, el gobernador Wilfredo Oscorima tampoco permanecía en Ayacucho, y eso a mí me consta, porque acompañé en gestiones a algunos alcaldes y había retraso por la ausencia del gobernador.
Ahora todas estas denuncias terminan afectando a la actual gestión. Estábamos en coordinación para crear una nueva unidad ejecutora y el Ministerio de Economía ya dijo que no va. Hay provincias que dependen de la unidad de Cangallo y eso complica la atención a los ayacuchanos.
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Como consejera regional representante de Huanca Sancos, también puedo ver que es muy lamentable la poca o nula atención a las zonas del sur de Ayacucho por parte del Gobierno regional.
El nuevo presupuesto que fue destinado al estadio, en el contexto del caso de los relojes Rolex, debió haber sido destinado a otras urgencias del sur, como la construcción de represas o la mejora de infraestructura en educación primaria, secundaria e incluso superior.
Las denuncias que ahora han salido afectan la gobernabilidad. Preocupa a la ciudadanía de Ayacucho que esta gestión está en riesgo de quedar en nada.
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“El Gobierno regional ha estado en piloto automático”
Ernesto Valdez Cárdenas, consejero de Ayacucho
La gestión regional de Ayacucho ya era mala, y esto viene desde periodos pasados. Wilfredo Oscorima tiene desde el 2012 más de diez obras no liquidadas. Estas obras ya han demandado un presupuesto superior a los mil cien millones de soles. Es decir, es dinero ejecutado pero las obras hasta hoy no han sido culminadas.
Ahora, en el primer año de la nueva gestión, en el 2023, no hubo nuevos recursos, más allá del presupuesto que recibe todo Gobierno regional. Recién ahora surgió esto de los cien millones de soles, en el contexto de los relojes Rolex. Pero el presupuesto ha sido destinado para un estadio y esto no ayuda en nada a cerrar las brechas. Debió priorizar las obras no liquidadas para culminar su ejecución u otras obras nuevas, por ejemplo, para sector agrario.
El escándalo de los relojes Rolex ha ocasionado que recién se ponga la mirada en la gestión del Gobierno Regional de Ayacucho, una gestión que ha estado funcionando en piloto automático, porque el señor Oscorima ha permanecido más en Lima.
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El caso de los relojes Rolex denota algo oscuro. En estas circunstancias, va a depender de cómo avanza en las investigaciones el sistema de justicia y si procede alguna medida, como una prisión preventiva. En realidad, Ayacucho no gana nada con la permanencia de Oscorima en el Gobierno regional.
“La población de Ayacucho debería revocarlo”
Yovana Mendoza, presidenta de ASFAH
Ahora nos damos cuenta por qué Dina Boluarte viajaba continuamente a Ayacucho y por qué Wilfredo Oscorima se fue de manera inmediata a Lima, tras la masacre del 15 de diciembre. Ahora nos damos cuenta por qué ingresaba a Palacio de Gobierno como si fuera su casa. Ahora nos damos cuenta cuáles habían sido las intenciones de este hombre. El señor Oscorima merece estar preso por todo lo que está ocasionando en Ayacucho y en todo el Perú.
Para nosotros, este señor ha dejado de ser nuestro gobernador regional desde el primer día en que partió de Ayacucho para encontrarse con Dina Boluarte. No nos representa. Es un traidor, no solo para los familiares de las víctimas del 15 de diciembre, sino para todo Ayacucho.
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A nosotros nos indignó que Oscorima haya invitado a Dina Boluarte a los carnavales y dijo que estamos en paz. ¿De qué paz habla el señor Oscorima? Paz encontraremos el día en que todos los responsables de las muertes estén presos.
El señor Wilfredo Oscorima no va a dar un paso al costado. Lo que nos queda a toda la población de Ayacucho es pedir su vacancia o revocarlo de una vez, y esto debió haber sido desde el año pasado, cuando ya sabíamos que estaba traicionando al pueblo.
Edición Impresa - La Republica | Lima - Sabado 23 de Noviembre del 2024