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¿Cómo llegan Trump y Biden a su primer debate cara a cara?

Por su importancia, este encuentro ha generado gran expectativa a nivel mundial, puesto que permitirá mostrar las fortalezas y las debilidades tanto del aspirante a la Casa Blanca como del actual inquilino que busca un segundo período.

Columna de opinión del profesor Antonio Camborda. Foto: Composición La República
Columna de opinión del profesor Antonio Camborda. Foto: Composición La República

Por: Antonio Camborda

Este martes 29 de setiembre, a partir de las 9.00 p. m. (hora del Este de EE.UU.), se iniciará el primero de tres debates entre el actual presidente de Estados Unidos de América, Donald Trump, y el candidato demócrata Joe Biden, que es parte de la campaña electoral para ocupar la Casa Blanca.

El debate se realizará en Case Western Reserve University en Cleveland, Ohio, será moderado por el presentador de Fox News Sunday, Chris Wallace, y tendrá una hora y media de duración.

Será transmitido en vivo por las cadenas más importantes de televisión de Estados Unidos, entre las que se encuentran dos cadenas en español: Univision y Telemundo. Por eso, se espera que el debate rompa el récord de 74 millones de espectadores que logró en el año 2016.

A la contienda, organizada por la Comisión de Debates Presidenciales, un organismo autónomo sin inclinación partidaria, llega un Trump golpeado por una serie de problemas: la falta de liderazgo para enfrentar el COVID-19, la crisis económica y la reciente revelación de sus cuentas personales que lo muestran como un posible evasor de impuestos. Y un Biden, con un plan para reactivar la economía y de paso favorecido por las encuestas.

El actual presidente se caracteriza por recurrir a apodos, a insultos, a lanzar todo tipo de acusaciones a sus adversarios, y esa conducta ya la demostró tanto en las convenciones republicanas, en las que demolió a los aspirantes, entre otros Jeb Bush y Marco Rubio, como en los debates con Hillary Clinton, a la que la maltrató y le falto el respeto.

El último lunes 28 de setiembre, por ejemplo, Trump escribió un Twitter y pidió que antes del debate del 29 le hagan un examen de orina al candidato demócrata para descartar el uso de algún estupefaciente, insinuando que Biden consume drogas.

En cambio, el vicepresidente del gobierno de Barack Obama es un hombre muy culto y respetuoso, y es imposible que recurra a los insultos o desafíos. Y es muy difícil que “pise el palito”, o responda con insultos las provocaciones.

Este primer debate será moderado por el presentador de Fox News Sunday, Chris Wallace, quien cumplió el mismo rol en el debate del 2016.

Este periodista tiene un estilo muy agudo cuando entrevista, y, por eso, Trump lo ha criticado cada vez que ha tenido oportunidad de hacerlo en su cuenta de Twitter.

El 2 de setiembre, cuando la Comisión de Debates Presidenciales difundió el calendario de los debates y los nombres de los periodistas que iban a actuar como moderadores, el director de comunicaciones de Trump, Tim Murtaugh, emitió un comunicado señalando que “algunos” de ellos podían ser identificados como opuestos al actual presidente.

Y agregó que Biden “tenía un compañero de equipo en el escenario”.

Añadió en su comentario que “no son los moderadores que hubiéramos recomendado si se hubiera permitido que la campaña tuviera alguna participación”.

Pero, la comisión de debate no permite que los asesores de los candidatos metan sus narices en su trabajo, pues ellos tienen el derecho de escoger a los moderadores bajo su propio criterio y tampoco aceptan que haya veto contra ninguno de los periodistas que escojan.

La oficina de elecciones de Biden también emitió un comunicado en esa oportunidad en el que dijo que “espera con interés participar en los debates establecidos por la comisión, sin importarle quiénes sean los moderadores elegidos independientemente”.

Se recuerda que, en el mes de agosto, Rudolph Giuliani, abogado de Trump, envió una carta a la Comisión de Debates Presidenciales acompañando una lista de 24 periodistas para escoger de ella al o a los moderadores. Se supo que el 40% de sus propuestos pertenecen a las plantillas de Fox News y Fox Business, pero no estaba el nombre de Wallace. Nadie de la lista de Giuliani fue seleccionado.

En esta oportunidad, ningún periodista de CNN, la cadena de noticias cuyos periodistas son blanco frecuente de ataques por parte del presidente de los Estados Unidos, ha sido considerado como moderador. En los debates del año 2016, Anderson Cooper, fue co-moderador.

El segundo debate será el 15 de octubre y tendrá como moderador a Steve Scully, editor político de C-SPAN, quien fue moderador alterno en los debates de 2016.

Y en el tercer debate, el 22 de octubre, Kristen Welker, la corresponsal de NBC News para la Casa Blanca y copresentadora del programa de fin de semana Today, será la moderadora. Será la primera vez que modere un debate de elecciones generales.

La periodista Susan Page, jefa del buró en Washington del diario USA Today, moderará el debate presidencial entre Mike Pence y la senadora Kamala Harris, el 7 de octubre.

De acuerdo al mecanismo de los debates, los moderadores son los únicos responsables de elegir las preguntas y los temas para el primer y el tercer debate.

En cambio, el segundo debate, que está previsto que se celebre en Miami, seguirá un formato en el que los residentes del sur de la Florida plantearán las preguntas y, el moderador, será responsable de facilitar el debate.

A parte de los debates presidenciales, habrá uno entre el actual vicepresidente Mike Pence y la compañera de fórmula de Biden, Kamala Harris. Ese debate será el miércoles 7 de octubre en la Universidad de Utah, en Salt Lake City, Utah, también a las 9 de la noche, hora del Este. La moderadora será Susan Page, USA Today Washington.