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Polémica en Reino Unido: cámaras chinas prohibidas en EE. UU. son usadas en baños escolares

“La preocupación es, ¿los chinos están extraterritorializando su estado de vigilancia?”, se preguntaron desde Estados Unidos.

Estados Unidos acusa a China de recopilar datos. Foto: AFP
Estados Unidos acusa a China de recopilar datos. Foto: AFP

Las cámaras de vigilancia fabricadas por Hikvision, una empresa china implicada en graves violaciones de derechos humanos e incluida en la lista negra por el Gobierno de Estados Unidos, se usa en todo el Reino Unido, un país donde donde la supervisión por video es alta.

Este lunes 21 de septiembre el diario británico The Guardian reportó que estas cámaras se utilizan, inclusive, en baños escolares en el condado de Norfolk. En la escuela secundaria Smithdon, por ejemplo, se emplea “para garantizar la salud y la seguridad personal de todos los estudiantes y para prevenir el vandalismo y los daños”.

El año pasado el Parlamento del Reino Unido ya había expresado su preocupación por este tipo de cámaras de vigilancia, pero resurgió la polémica ahora que la pandemia provocó que se utilice con más asiduidad para el rastreo de contactos.

China es otro Estado donde hay gran cantidad de cámaras de vigilancia. Foto: AFP

China es otro Estado donde hay gran cantidad de cámaras de vigilancia. Foto: AFP

Estados Unidos sostiene que estas cámaras sirven para vigilar a los uigures y otras minorías musulmanas en China, que están detenidas en lo que Washington llama “campos de concentración”, pero Pekín los resalta como “centros de formación profesional”.

“La preocupación es, ¿los chinos están extraterritorializando su estado de vigilancia?”, cuestionó James Lewis, investigador del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington DC.

Expertos están preocupados porque piensan que la inteligencia china puede usarlas para espiar o recopilar datos fuera de su país. “Podría argumentar que lo son cuando otros países están usando tecnologías como Hikvision que usan en sus propios ciudadanos. Ahora pueden hacerlo a nivel mundial”, agregó Lewis.

Hikvision rechaza estas acusaciones y declara que no hay evidencia alguna de que la vigilancia almacenada haya sido enviada a China. Sin embargo, reconoció que sus cámaras pueden haber sido usadas en “campos de reeducación” en la región china de Xinjiang.

Aunque el Departamento de Comercio de Estados Unidos incluyó al mayor proveedor mundial de equipos de vigilancia en su lista negra, todavía hay algunas cámaras en el país norteamericano. El Pentágono también sumó a Hikvision a una lista de grupos que son propiedad o están controlados por China.

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