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OMS modifica protocolo sobre el uso general de las mascarillas faciales

La nueva guía de la OMS ahora recomienda que el público en general utilice mascarillas en “áreas con transmisión generalizada” de COVID-19, donde no se pueda mantener el distanciamiento social.

Foto: Charly Triballeau / AFP
Foto: Charly Triballeau / AFP

La Organización Mundial de la Salud anunció este viernes la publicación de una guía actualizada sobre el uso de mascarillas faciales como parte del control de la propagación del coronavirus y detalló que las nuevas directrices se basan en “la evolución de la evidencia”, por lo que brinda consejos renovados sobre quién debe utilizarlas y cuándo, así como de qué material deben estar hechas.

Durante una conferencia de prensa, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus detalló que esta guía se ha desarrollado bajo una “revisión cuidadosa de todas las pruebas disponibles y una amplia consulta con expertos internacionales y grupos de la sociedad civil” y recalcó que las mascarillas “solo deberían usarse como parte de una estrategia integral en la lucha contra la COVID-19”.

El director hizo hincapié en que “las máscaras por sí solas no lo protegerán”, por lo que continúa recomendando que las personas que han dado positivo a la enfermedad deben permanecer aisladas y ser atendidas en los centros de salud, mientras que sus contactos también tendrán que cumplir con la cuarentena respectiva.

Asimismo, a diferencia de la guía pasada, que se publicó el 6 de abril y donde se recomendaba el uso de la mascarilla solo para el personal sanitario o para quienes atendían a personas potencialmente infectadas, la OMS ahora ha extendido esta medida y aconseja que el público en general debe utilizarlas en “áreas con transmisión generalizada” de coronavirus.

Tedros instó a los gobiernos a alentar el uso de mascarillas o tapabocas de tela en estos lugares de transmisión comunitaria, donde no se puede mantener el distanciamiento social de mínimo dos metros con otras personas, como es el caso del transporte público, en tiendas o espacios cerrados con gran concurrencia de gente.

“Nuestra guía actualizada contiene nueva información sobre la composición de las máscaras de tela basada en la investigación académica solicitada por la OMS. Sobre la base de esta nueva investigación, la OMS informa que las máscaras de tela deben constar de al menos tres capas de material diferente”, explicó el director.

Mascarillas de tela

La experta del Departamento de Emergencias Sanitarias de la OMS, April Beller, explicó a EFE que hay nuevas evidencias científicas, a partir de investigaciones de las universidades de Stanford y Colorado, sobre las máscaras de tela, los diversos materiales de los que pueden estar hechas para actuar como “barrera” ante las microgotas y el nivel de protección que confieren.

La guía de la OMS recalca que no todas las mascarillas de tela tienen la misma calidad de filtración, uno de los factores determinantes para su efectividad. Los materiales para considerar en la fabricación de un tapaboca eficaz son el polipropileno, el algodón y el poliéster, mientras que la celulosa y la seda deben ser tomadas como últimas alternativas.

“Si yo estoy infectada o tosiendo, todo entra en la máscara y no sale por el otro lado, así que es una manera para proteger al resto de personas”, señaló Beller. “La distancia es la mejor prevención que existe. Si no es posible, ¿por qué la tela? Porque las mascarillas quirúrgicas deben ser guardadas para el personal sanitario”. Sin embargo, personas de más de 60 años o con enfermedades crónicas deben usar un tapaboca médico.

Materiales para las mascarillas

Beller explicó que lo ideal es combinar las telas y que la mascarilla tenga tres capas, utilizando el material más absorbente (por ejemplo, el algodón) más cerca de la boca, mientras que por fuera debería ir el componente que más repele el agua, como el poliéster. Finalmente, como filtro (al medio), se podría emplear el polipropileno, usado en las mascarillas quirúrgicas.

Reglas para mascarillas de tela

En primer lugar, hay que lavarse o desinfectar las manos antes de colocarlas, y si se utilizan por poco tiempo, por ejemplo, para un trayecto en autobús, pueden ser guardadas en una bolsa de plástico para volverlas a usar después. Se recomienda lavar las mascarillas todos los días, idealmente a 60 grados, sino a mano y con agua, desinfectándolas un minuto con cloro y enjuagándolas muy bien.

También se debe tener en cuanta que, si están muy estiradas, no funcionan. La máscara facial debe cubrir nariz, boca y mentón, y a su vez, deben estar bien pegadas al rostro por todos los lados.

Con información de EFE.