Ezio Oliva: “Ádammo estuvo a punto de firmar un contrato millonario”
Entrevista. El cantante y productor peruano comparte detalles sobre el quiebre de la banda y de su regreso al pop.
En esta ocasión, en el programa Lado B de La República volvimos a la música y conversamos con el cantante y productor Ezio Oliva.
-Te perfilabas como la cara de Ádammo. ¿Veías una carrera como solista?
Sí, definitivamente. Tenía 17 años, pero tres años antes había participado en Superstar Renovado, que era un reality de televisión. No tenía idea de que iba a tener una banda (...). Hay momentos buenos, mo-mentos malos, pero lo que importa es seguir sacando música, seguir viviendo de esto que uno ama.
-Y es complejo sobre todo en nuestro país. Justo estábamos hablando de tu nuevo single (‘Lugar especial’). Después de años vuelves al pop. Eras mucho de escuchar Diego Torres...
¡Total! En mi banda era el menos rockero. Pero creo que ese complemento, de esta voz melódica con este power pop un poco más rockero, creo que fue lo hizo que Ádammo impacte como impactó y logre lo que se logró: nominaciones al Grammy y premios MTV.
¿Qué recuerdas de esa época?
Tengo la imagen clarísima de que teníamos muy claros nuestros sueños, y eso fue decisivo.
¿Cuál era tu sueño?
Llenar lugares. Mi sueño era que hagamos giras. Cantamos en Bogotá y nunca llegamos a cantar en Ecua-dor porque teníamos ya una gira en Perú y entonces no podíamos. En el 2009, MTV era muy fuerte, lo veía casi toda la región. Nos fuimos a Miami, eran dueños de Nickelodeon, hicimos la canción de una serie que se llama ‘Grachi’, fuimos parte de un episodio en Miami. Y como pasa, a veces, nos peleamos (sonríe). Como pasa en todo matrimonio.
¿Ahí es el quiebre de la banda?
Sí, total. Mucha gente no lo sabe, pero estábamos a punto de firmar un contrato muy muy grande, literal, un contrato millonario con una disquera. Creo que nuestra inmadurez, nuestros egos... no nos permitieron ver más allá. No hubo un último show.
Y hablando de resiliencia, tú perdiste a tu papá bastante joven, ¿no?
Yo perdí a mi viejo más o menos a los 18 años, fue un golpe enorme. Hay gente que empieza la vida mucho antes, pero yo recién me ‘destetaba’ y de pronto, se me va mi viejo, que es importante en la vida de cualquiera.
¿Y cómo te sientes ahora como padre?
Me considero un padre consciente. No existe la perfección, todos tenemos errores, pero tengo muchas ganas de ser un buen papá y de que mis hijas se sientan orgullosas de mí. (Vea el video de la entrevista completa en Lado B).