Economía

Embajador Carlos Vásquez: “Las inversiones de APEC en el Perú superan los US$50.000 millones”

Para el presidente de las Reuniones de Altos Funcionarios del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), existe una rivalidad creciente y una distribución más dispersa y equitativa del poder económico a nivel global, con China en el eje, que debe ser aprovechada por el Perú.

El embajador Carlos Vásquez no descarta que el megapuerto de Chancay pueda allanar un capítulo aparte en APEC 2024, sobre todo porque China y EE.UU. son parte del bloque. Foto: La República
El embajador Carlos Vásquez no descarta que el megapuerto de Chancay pueda allanar un capítulo aparte en APEC 2024, sobre todo porque China y EE.UU. son parte del bloque. Foto: La República

El embajador Carlos Vásquez, SOM Chair de APEC 2024, anticipa la consolidación de inversiones por más de US$50.000 millones del Asia Pacífico a Perú con la organización de APEC 2024, bloque que suma US$44.000 millones solo en exportaciones a nuestro país. Esto nos ubicaría en una plaza angular del comercio global.

¿Qué tan importante es la cumbre APEC para el Perú?

Las economías APEC representan el 40% de la población global —solo China tiene 1.400 millones de habitantes—, el 60% del PBI global y casi el 50% de los intercambios comerciales. Cuando Perú accede al foro en 1998, nosotros no teníamos acuerdos de libre comercio con ninguna de las economías APEC y es a raíz del ingreso que hemos alcanzado acuerdos bilaterales con 10 de ellas. Con cuatro de ellas, tenemos un acuerdo de libre comercio plurilateral, que es el CPTPP, que involucra a economías como Malasia, Brunéi, Nueva Zelanda y Vietnam. Estamos negociando un TLC con Indonesia y Hong Kong,y con esta última está bastante avanzado y esperamos cerrarlo este año durante la cumbre. De ser así, a fines del 2024 tendríamos acuerdos con 15 naciones APEC, prácticamente todas.

¿Qué tanto nos favorece en materia de exportaciones?

Las exportaciones de Perú al Asia, desde que ingresamos al foro, han crecido entre 12% y 14% como promedio anual. Hace 26 años, nuestras exportaciones al bloque Asia Pacífico estaban entre los US$4.000 y US$5.000 millones. El año pasado, se exportaron US$44.000 millones. Se multiplicó por diez.

¿Y qué tan importanes son las inversiones del bloque en nuestro país?

Las fuentes oficiales indican que hemos recibido del bloque una inversión en el orden de los US$9.400 millones. Esta cifra, para mí, queda cortísima. Solo China indica que su stock de inversiones aquí llega a los US$30.000 millones. Entonces, si consultamos las diferentes fuentes, hablaríamos de US$50.000 millones de las economías APEC hacia el Perú en las últimas dos décadas.

Venimos de una guerra. ¿Cómo se recuperó el diálogo?

A raíz de la guerra en Ucrania, fue difícil lograr un consenso en APEC, un foro que adopta recomendaciones y decisiones no vinculantes con base en el consenso. En Tailandia 2022, era imposible porque Rusia es una de las economías del bloque, pero el consenso ya se ha recuperado desde el comienzo de esta cumbre 2024. Esperemos que se mantenga. Un mérito de Perú es haber logrado reconciliar a las partes encontradas.

Las reuniones de seguridad alimentaria y minería son las siguientes en lista.

La FAO dice que a nivel global se pierde en promedio 30% de la producción de alimentos cada año. En el Perú, es 47%, y somos un país con anemia, lo cual es paradójico. No solo porque la cadena de distribución es mala (infraestructura de carreteras, cadena de frío, etc.), sino porque hoteles y restaurantes desperdician alimentos. Eso, por ejemplo, lo discutimos en la reunión de Urubamba, sobre eso dimos un compromiso, y proponemos que las economías conducentes adopten medidas.

¿Y la agenda minera?

No es una reunión oficial, sino un diálogo informal de alto nivel en el que aspiramos a que se restablezcan las tareas del grupo. Debemos reconocer que, como país, seguimos exportando minerales, fundamentalmente. La dotación de recursos nos dará ventajas frente a otros países, pero se trata de gestionar de manera eficiente, social y ambientalmente hablando, y no solo ex portar materia prima. La ventaja de producir cobre es que podemos ser proveedores por las próximas tres décadas, no caer en otra ‘prosperidad falaz’. Somos un país que repite ciclos, y no aprendemos de ellos. Planteamos una agenda de tres puntos: el rol de minerales en la transición, innovación en la industria para reducir niveles de polución, y la situación de la small-scale mining o minería informal e ilegal en Perú. Hemos enviado la propuesta y estamos esperando respuesta.

Perú también ha introducido, por primera vez en APEC, el tema de la informalidad.

Para nosotros, en términos de nuestra realidad, el entregable más importante es la hoja de ruta de la transición de los actores hacia una economía formal y global. Negociamos esta hoja con ocho elementos claves que incluyen el uso intensivo de herramientas digitales para propiciar la formalidad —tanto pequeñas y medianas empresas, como Gobierno—, inclusión financiera y reformas estructurales en materia impositiva y estándares laborales. Ojalá acepten.

¿Qué estrategia está adoptando la Cancillería para presentar a un Gobierno con tan poca aprobación ante el foro?

No existe, a nivel de representantes técnicos del foro, una percepción muy clara hacia la situación del Perú. No afecta las decisiones que tomamos. Al recuperar el consenso, proyectamos la imagen de un país con un rol de neutralidad constructiva en beneficio del bloque.

¿Aun cuando Chancay reconfigure el comercio en el Asia Pacífico en favor de China?

Esa discusión puede ser un efecto colateral, pero no está en la agenda. Indudablemente, la tensión geopolítica alcanza a la cumbre. Hay sí una rivalidad creciente y una distribución más dispersa y equitativa del poder económico a nivel global. Se está generando un polo alternativo al representado por EEUU y Europa, y lo que tiene que hacer Perú, con un mínimo margen de autonomía estratégica, es beneficiarse de lo mejor que puedan ofrecer todos. Desde el punto de vista chino, este puerto puede ser una extensión de su Ruta de la Seda.

Pero EEUU es otro invitado APEC, y Xi Jinping cortará la cinta de Chancay frente a ellos. ¿No es un mensaje al mundo?

Sí, puede ser concebido de esa forma. Para nosotros es una inversión que beneficia al país. Como lo interpreten los demás, lo harán en función de sus propios intereses.

¿Y un escalamiento de las tensiones internas en los próximos meses complicaría la tarea de Cancillería de cara al APEC?

Sería absolutamente indispensable evitarlas.