Ciencia

Fósil de hace más de 8 millones de años sugiere que los humanos no aparecieron en África

Científicos analizaron el cráneo y la mandíbula de un homínido muy antiguo y descubrieron que este surgió lejos del continente conocido como la cuna de la humanidad.

Restos de la mandíbula y el hueso frontal del cráneo del homínido Anadoluvius turkae. Foto: Sevim-Erol, et. al (2023)/Communications Biology
Restos de la mandíbula y el hueso frontal del cráneo del homínido Anadoluvius turkae. Foto: Sevim-Erol, et. al (2023)/Communications Biology

La famosa teoría evolutiva de que los primeros humanos surgieron en África, el continente conocido como la cuna de la humanidad, se encuentra en entredicho tras un reciente estudio que analiza un fósil de hace 8.700.000 años encontrado en el Mediterráneo, en Europa.

A partir de dicho hallazgo, el equipo de científicos a cargo de la investigación asegura que puede ser cierto el escenario de que los antepasados humanos evolucionaron primero en el continente europeo y luego migraron al continente africano; y no en el sentido contrario, como señalan muchos libros de texto.

El resto fósil en cuestión se trata del cráneo parcial de un homínido llamado Anadoluvius turkae, una especie denominada así por haberse descubierto en Turquía, exactamente en el pueblo Çorakyerler , cerca de la ciudad de Çankırı.

Este vestigio, hallado en 2015, está compuesto principalmente por la estructura facial y el hueso frontal del cráneo, partes que, para sorpresa de los expertos, han permanecido perfectamente conservadas pese al transcurso de los milenios.

 El cráneo fósil de Anadoluvius turkae en su yacimiento in situ. Foto: Ayla Sevim-Erol

El cráneo fósil de Anadoluvius turkae en su yacimiento in situ. Foto: Ayla Sevim-Erol

El estudio, dirigido por los arqueólogos David Begun y Ayla Sevim Erol, se publica en un artículo de la revista Communications Biology.

Un viaje migratorio de Europa a África

Dada la casi integridad del cráneo fósil, los científicos pudieron reconstruir sus piezas faltantes y comparar sus características y atributos con los de otras especies humanas o relativas a ellas para así calcular qué lugar ocupó el Anadoluvius turkae en el complejo árbol evolutivo.

La conclusión de los autores fue que este antiguo homínido formó parte de la especie que dio origen a los Homo sapiens (humanos modernos) y a los chimpancés, bonobos y gorilas, nuestros parientes más cercanos en la actualidad.

“Pudimos casi reconstruir la cara completa (de Anadoluvius turkae) y existe una parte nueva de la frente con hueso preservado aproximadamente hasta la coronilla del cráneo. Los fósiles descritos anteriormente no tienen tanta parte del cerebro”, explica en un comunicado Begun, quien es profesor del Departamento de Antropología en la Universidad de Toronto, en EE. UU.

 Los científicos reconstruyeron las piezas faltantes del cráneo de Anadoluvius a partir de la comparación con otros parientes de los humanos. Foto: Communications Biology (2023)

Los científicos reconstruyeron las piezas faltantes del cráneo de Anadoluvius a partir de la comparación con otros parientes de los humanos. Foto: Communications Biology (2023)

“Nuestros hallazgos sugieren, además, que los homínidos no solo evolucionaron en Europa occidental y central, sino que pasaron más de 5 millones de años evolucionando allí y extendiéndose hacia el Mediterráneo oriental antes de dispersarse finalmente en África, probablemente como consecuencia de cambios ambientales y disminución de los bosques”, señaló el experto.

Una hipótesis del origen de la humanidad

Si bien los expertos proponen que la verdadera cuna de la humanidad fue Europa y no África ―principalmente porque los miembros del grupo al que pertenece Anadoluvius solo han sido identificados en el Viejo Continente― , enfatizan que todavía se trata de una hipótesis.

“Esta nueva evidencia respalda la hipótesis de que los homínidos se originaron en Europa y se dispersaron en África junto con muchos otros mamíferos hace entre 9 y 7 millones de años, aunque no lo prueba definitivamente”, indicó Begun.

“Necesitamos encontrar más fósiles de Europa y África de entre 9 y 7 millones de años para establecer una conexión definitiva entre los dos grupos”, añade.

Según estiman los científicos, el Anadoluvius puede haber tenido el tamaño de un chimpancé macho grande, de entre 50 y 60 kg, o el de un gorila hembra, entre 75 y 80 kg.

Asimismo, a juzgar por la mandíbula y los dientes de Anadoluvius, los animales que se encuentran a su lado (como jirafas, antílopes,... ) y los indicadores geológicos del medioambiente, los científicos creen que el antiguo homínido vivía en un bosque seco alimentándose de alimentos duros y raíces, y también que pasó mucho tiempo sobre la superficie.

"Anadoluvius probablemente vivió en condiciones relativamente abiertas, a diferencia de los entornos forestales de los grandes simios actuales", sostuvo Sevim Erol, coautor del estudio.