Científicos reconstruyen el rostro del 'Hobbit', nuestro primo enano extinto hace 50.000 años
Este antiguo homínido habría vivido aislado en una isla, por lo cual no creció más de 106 centímetros.
Un equipo multidisciplinario de arqueólogos y artistas ha reconstruido con gran detalle el rostro del 'Hobbit', uno de los homínidos más enigmáticos en el árbol de la evolución humana. Las ilustraciones, realizadas a partir de los cráneos de los especímenes hallados hasta la fecha, se han difundido en un estudio publicado este mes de junio.
Se cree que el 'Hobbit', cuyo nombre oficial es Homo Floresiensis, fue descendiente de un grupo de Homo Erectus que llegó hace 100.000 y 50.000 años a la Isla de Flores, en Indonesia, donde habría vivido lejos del contacto de otras especies humanas coetáneas.
Ese mismo aislamiento habría sido el causante de que no crezca más de los 106 centímetros en promedio y no pese más de 30 kilogramos, debido a un proceso evolutivo denominado enanismo insular, señala el Museo Nacional de Historia Natural Smithsonian.
Imagen en 3D del 'Hobbit'. Foto: Cicerón Moraes
¿Cómo se reconstruyó el rostro del H. Floresiensis?
En el arte de reconstruir rostros antiguos, se suele recrear la topografía de la piel del cráneo antiguo a partir de comparar este resto óseo con los de otros de la misma especie y someterlos a una técnica conocida como deformación anatómica.
Sin embargo, cuando el sujeto a reconstruir es una especie humana antigua, como es el caso del 'Hobbit', el desafío es mucho mayor, ya que no se han descubierto muchos cráneos de este pariente extinto, que también uso herramientas de piedras para cazar.
En este caso, los expertos tuvieron que comparar las tomografías computarizadas de los cráneos mejor conservados del 'Hobbit' con los escaneos craneales de un chimpancé (Pan troglodytes) y un hombre moderno masculino (H. Sapiens).
El rostro del Hobbit fue reconstruido tras comparar el cráneo de este homínido con el de un chimpancé y un Sapiens. Foto: Ciceron Moraes
"El cráneo [del 'hobbit'] está casi completo, le faltan pequeñas partes en la región de la glabela (la parte de la frente directamente entre las cejas) y el hueso nasal, pero afortunadamente fue posible diseñarlos con la ayuda de la deformación anatómica", sostuvo Cícero Moraes, un experto en gráficos 3D que colaboró en el estudio.
Tras este procedimiento, se consiguió una representación del rostro del H. Floresiensis, en 3D, que tenía colores de tonos grises, pero que luego fue estilizada, añadiéndole piel y vello facial.
Una nariz menos protuberante
"En términos generales, H. Floresiensis probablemente tenía una nariz menos protuberante que los hombres modernos, la región de la boca estaba un poco más proyectada que la nuestra y el volumen del cerebro era significativamente más pequeño", dijo Moraes.
La diminuta masa encefálica del 'Hobbit', que representa una tercera parte del cerebro humano, ha sido uno de los temas más discutidos por los científicos. Mientras unos autores aseveran que el órgano pudo haberse encogido producto del enanismo insular, otros postulan que esta característica es lo suficientemente inusual como para declarar al H. floresiensis como "otra especie humana".