Una forma muy peculiar de prometerse amor eterno tuvieron Juan Ricardo Cuba García y su novia, Carol, pues, luego de que tuvieran que sortear la espera de un donante de corazón, por fin llegó el día. Los doctores del Instituto Nacional Cardiovascular (Incor) lograron realizar una intervención satisfactoria.
“Me siento muy feliz. Ahora puedo respirar a plenitud, subir la escalera. No podía hacer nada de eso; solo dormía todo el día. Ahora tengo la oportunidad de vivir. Cancelé mi año laboral y muchos sueños. Por eso agradezco a la familia de mi donante, a Incor y a todo su personal. Esto es lo mejor que me ha pasado”, contó emocionado Ricardo a los medios de comunicación.
Por su parte, los médicos indicaron que, si bien la operación fue un éxito, Ricardo deberá seguir ciertas indicaciones postoperatorias para poder continuar con su vida con normalidad.
“Ricardo ahora deberá seguir los cuidados necesarios luego de un trasplante, pero podrá hacer su vida con total normalidad. Podrá hacer deporte y otras actividades que antes no podía, y sobre todo cumplir sus sueños y metas”, dijo el especialista del Incor.
Sin embargo, la historia no queda ahí, pues su novia, Carol, quien lo ha acompañado desde hace 6 años, decidió pedirle matrimonio tras la exitosa cirugía. La mujer llegó hasta el cuarto de Ricardo con un arreglo de flores, un peluche de corazón y un anillo de compromiso. Tras el emotivo momento, el hombre le dio el sí.
“Ahora nuestro compromiso es más fuerte. Algunas personas se casan teniendo salud; otros empiezan en la enfermedad. Y ese fue nuestro caso; pero ya pasó y ahora nuestro amor es más fuerte que nunca”, manifestó emocionada la novia.