El pasado 15 de junio, el Ministerio de Salud (Minsa) anunció que la aplicación de la cuarta dosis contra la COVID-19 se ampliará para los mayores de 40 años. Tras dicha medida, a la fecha, en la región Lambayeque se van colocando más de 132.000 dosis.
Esto cobra relevancia en este departamento, pues se ha registrado un incremento progresivo de contagios en las últimas quincenas del año. “Si bien el número de hospitalizados y fallecidos ha disminuido, los contagios siguen aumentando en la región”, señaló el epidemiólogo de la Gerencia Regional de Salud (Geresa), Jorge Fernández Mogollón.
En ese sentido, indicó que tan solo en la quincena de junio se han registrado más de 129 casos de COVID-19 comprobados con prueba antígena.
Según explica, esto se debe a que las personas han disminuido las precauciones contra la enfermedad y, además, a que, producto de las bajas temperaturas, los lugares y vehículos mantienen las ventanas cerradas, creando, de esa forma, un ambiente propicio para el contagio.
El epidemiólogo de la Gerencia Regional de Salud (Geresa), Jorge Fernández Mogollón, indicó que se van aplicando más de 132.000 dosis de la vacuna contra el COVID-19 a las personas mayores de 40 años. Crédito: La República.
Por ello, el epidemiólogo resaltó la importancia de seguir manteniendo las medidas preventivas como el uso de mascarillas y la aplicación de las vacunas. “Actualmente, las personas han bajado la guardia respecto a este tema y no acuden a vacunarse o, en caso presenten síntomas, no acuden a un centro de salud, pues piensan que solo se trata de un resfriado”, manifestó.
PUEDES VER: Coronavirus en el Perú: mayores de 40 años ya pueden ir por su cuarta dosis contra la COVID-19
Además, hizo énfasis en que en distritos de las provincias de Lambayeque, Chiclayo y Ferreñafe se presentan bajas tasas de vacunación. Por ello, han implementado la medida de ir casa por casa para aplicar las dosis correspondientes.
Añadió que han habilitado un link de registro en las redes sociales de la Gerencia Regional de Salud para que los familiares de los adultos mayores, que están postrados o que por recomendaciones médicas no salen, puedan empadronarlos y así el personal de salud acuda a su domicilio a aplicarles la cuarta dosis.