Yuracmayo, donde nace el agua para Lima
Un viaje de 120 km. En las alturas de la provincia de Huarochirí, a 4.300 m s.n.m., un sistema de lagunas y reservorios de Sedapal permiten garantizar el agua diaria para 11 millones de hogares.
El agua que abastece los hogares de más de 11 millones de habitantes en Lima y Callao nace en la provincia de Huarochirí, en la represa de Yuracmayo, que en quechua significa río blanco por las aguas cristalinas que almacena provenientes del imponente nevado Sullcon. Desde ahí se inicia un recorrido de 120 kilómetros por los ríos Blanco y Santa Eulalia, que dan origen al río Rímac, hasta la planta de procesamiento de Sedapal, en El Agustino.
“Esta represa es parte de todo un sistema que incluye 19 lagunas y tres megarreservorios. Aquí (en Yuracmayo) estamos en la naciente del río Rímac. Desde aquí se filtra el agua hacia el río Blanco y junto con el Santa Eulalia forma el río Rímac, y nosotros la recibimos en la Atarjea. El agua que vemos en este momento en la represa demorará 24 horas en hacer su recorrido hasta nuestras instalaciones”, explica Francisco Dumler, presidente de Sedapal.
Yuracmayo es una laguna artificial construida en 1995. Se ubica a 4.300 m s.n.m. y tiene una extensión de 5 km de largo y 40 metros de profundidad. Es una de las tres más importantes de la región, pues puede almacenar hasta 48 millones de m³ de agua, lo que en caso de una sequía le permitiría a Sedapal suministrar por 48 días continuos agua a la capital.
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“Junto con las reservas de Antacoto, Huascacocha y 19 lagunas, suman los 333 millones de metros cúbicos que permiten abastecer a 11 millones de personas”.
La represa de Yuracmayo fue pensada por el sabio ancashino Santiago Antúnez de Mayolo para la generación de energía, a través de una red de hidroeléctricas en la cuenca del río Rímac, y de paso asegurar agua para la capital.
“Además del problema de sequías y falta de lluvias, el principal peligro es la calidad del agua, pues esta se contamina mucho. Básicamente por el crecimiento de la ciudad en distritos que están por encima de la Atarjea, como Chaclacayo, San Mateo, Chosica, Ricardo Palma, que además tienen mal tratamiento de sus aguas residuales; es decir, vierten los desagües directamente al río y nosotros recogemos esa agua y la volvemos a tratar”, precisa.
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Cambios en ciclo del agua
Ahora bien, Sedapal ha detectado que el cambio climático en nuestro país no solo ha generado el deshielo de varios nevados, sino también una alteración en el ciclo del agua, aunque por el momento sin una reducción en el volumen de agua que se recolecta en los reservorios.
“Las montañas que rodeaban la reserva antes eran totalmente blancas, pero por suerte este proceso (de desglaciación) no ha afectado el llenado de las lagunas. No ha sucedido, pero sí hay cierta alteración de los ciclos de lluvia y eso también pertenece al tema del cambio climático”, dice Dumler.
El cambio climático ha obligado a Sedapal a realizar estudios en busca de nuevas fuentes de agua para abastecer a Lima, cuya población se estima superará los 13 millones en unos años. Una de ellas es la ampliación y mejoramiento del denominado túnel Graton, un acuífero de casi 12 kilómetros de extensión que cruza la cordillera de los Andes y, a través de reservorios subterráneos, filtra el agua de lluvia que cae en la zona occidental hacia el río Rímac.
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“El túnel Graton es la salida de un sistema de queñuales que necesitan filtrar agua. Esta agua es de las profundidades de este macizo andino; si este túnel es de una sola mina, imagina si podríamos juntar todas las minas y ampliar el túnel, tendríamos agua para Lima hasta el 2050″, explica el funcionario.
Aclara que el agua que se filtra por este túnel no tiene contacto con relaves, pues es expulsada por la misma minera, a través de un sistema de conducción para evitar que haya inundaciones.
Más familias con agua
En los últimos años, Sedapal viene ejecutando trabajos para mejorar y ampliar la red domiciliaria de agua potable a 800.000 ciudadanos que carecen de este servicio en 2.560 asentamientos humanos en Lima y Callao.
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De esta obras, indica Dumler, la más importante es la que se ejecuta en Nueva Rinconada, que cuenta con un presupuesto de 2.600 millones de soles, y permitirá dotar del suministro a 400.000 personas en San Juan de Miraflores, Villa El Salvador y Villa María del Triunfo.
Claves
Obras. Este año, Sedapal ejecutará proyectos por S/ 2.000 millones. Así, estima que hacia el 2030 cerraría su brecha con un 98% de cobertura en Lima y Callao.
Apoyo. Sedapal cumplió un millón de viajes de camiones cisterna con agua gratuita para 25 AA. HH. en estos 2 años.
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