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Sociedad

Jefe de la Sunedu: “El ministro Gallardo mostró preocupación por los estudiantes de la Telesup”

Tras golpe a reforma universitaria, organismo espera que Ejecutivo observe ley si Congreso la aprueba. Evalúa denunciar a legisladores por agravios.

larepublica.pe
Autoridad. Oswaldo Zegarra está dispuesto a defender la institucionalidad de la Sunedu. Incluso evalúa demandar a congresistas que hacen falsas acusaciones. Foto: difusión

En medio de las pretensiones en el Congreso para dar una segunda oportunidad a universidades no licenciadas y convertir a la Sunedu en un ente similar a la extinta Asamblea Nacional de Rectores (ANR), el superintendente Oswaldo Zegarra habla de la “amenaza más fuerte” a la reforma en siete años, las denuncias contra legisladores, los conflictos de intereses y lo que espera del Ejecutivo.

Usted conoce la Sunedu desde el 2015, cuando formó parte del primer consejo directivo. ¿Cree que esta es la mayor amenaza que enfrentan desde el Congreso en casi siete años?

Es la amenaza más fuerte y potente que hay por razones más de tipo político que por deseos de defender la autonomía. El primer embate fue cuando se dio la Ley Universitaria (LU), se comenzó con el licenciamiento y la adecuación de las universidades. Hubo demandas judiciales y acciones de amparo que el Tribunal Constitucional zanjó. Pero este sí tiene una connotación diferente, porque no solo parte del Congreso como amenaza, sino es una comisión - la de Educación- que (...) ha tomado como acción principal tratar de modificar aspectos de la LU que restringen o quitan la posibilidad de que la reforma continúe y sobre todo el organismo regulador deje de funcionar para que pueda retornar a una situación previa a la ley universitaria, que fue de caos.

¿Y es la primera vez que ve esa posición del Minedu?

Efectivamente. Desde que se creó la Sunedu, todos los ministros han actuado acorde a una política de aseguramiento de calidad y apoyo a la Sunedu. Indudablemente que es importante recalcarlo porque la amenaza no es muy legítima, está llena de intereses, intrigas, insultos. Hemos visto congresistas que salen a la TV a insultar, a hablar de mafias. Otros salen a decir que somos una entidad que recibe maletines de dinero, por lo cual es probable que establezcamos algún nivel de denuncia por agravio no solo a las personas, sino a la institución...

Denunciarán a los congresistas que han hecho esas afirmaciones contra la Sunedu.

Es probable porque no se puede permitir que, sin ninguna responsabilidad, se plantee esas acusaciones de muy bajo nivel. Si no lo hacemos, la sociedad va a pensar que es cierto. La Sunedu es una institución del más alto nivel, donde la influencia política y del poder económico ha sido nulo...

¿De qué congresista hablaríamos? ¿De Darwin Espinoza, de Acción Popular, quien habló de las maletas…?

El congresista (Edgar) Tello (Perú Libre), que ha salido a decir que la Sunedu es una mafia, lo cual es realmente criticable, por decir lo mínimo, e irresponsable...

Usted habla de “amenazas llenas de intereses”. ¿Qué tipo de interés hay en el Congreso o en los promotores de los proyectos?

Uno puede intuir que existen intereses, no lo puede afirmar porque debemos tener pruebas, pero indudablemente quienes están en esta lucha contra la reforma y la Sunedu son personas vinculadas a instituciones universitarias, como lo ha denunciado el periodismo y eso hace pensar que de repente existen intereses subalternos o de tipo económico u otra naturaleza…

Y en ese sentido, ¿cuál debería ser la posición de aquellos congresistas que podrían tener estos intereses?

Bueno, abstenerse de participar y de presentar proyectos que lo único que hacen es revelar sus intereses y no la intencionalidad que mencionan, supuestamente, en defensa de la autonomía.

Hace un momento, le hice la consulta sobre el Minedu ¿Cómo calificaría su posición frente a la reforma y la Sunedu?

La he calificado de ambigua, no he tenido la oportunidad de conversar directamente con el ministro, a diferencia de todos los anteriores, para tratar el tema específico de Sunedu. Pero el comunicado, que espero que no sea necesariamente la visión y la opinión del ministro, deja un margen para dudar que estén apoyando la reforma y la Sunedu como entidad reguladora.

Entidad. Sunedu aclaró que extensión de autorizaciones no es para universidades denegadas. Foto: Virgilio Grajeda / La República

“Espero que el Ejecutivo observe la ley”

¿Qué espera de aquí en adelante del Ejecutivo o del mismo Minedu?

El Minedu debería ser más preciso en su posición frente a la Sunedu. Espero que el Congreso no acepte que sea elevado a nivel del Pleno para, digamos, no permitir que se consolide este atropello. Espero que el Gobierno, si es que se diera la aprobación en el Pleno, observe esta ley. Nosotros vamos a iniciar acciones de inconstitucionalidad porque esto es una afrenta a la Constitución, que crea un espacio importantísimo para la mejora del sistema universitario. Incluso un miembro del TC ha dicho que la ley no atropella la autonomía. Es importante que la supervisión no esté en manos de universidades sino de un ente independiente.

En el tiempo que está en el cargo, ¿se ha llegado a comunicar con el presidente Pedro Castillo?

Lamentablemente no. Me imagino que tiene tanto trabajo, problemas y no hemos pedido una cita con el presidente. La única oportunidad que hemos tenido es conversar con el ministro (de Educación). Con Juan Cadillo tuvimos un trabajo importante para comenzar a desarrollar y ver la situación de los estudiantes de universidades denegadas. Eso está trunco.

Y con el ministro Carlos Gallardo solo tuvo una reunión. ¿De qué se habló esa única vez? ¿Algo vinculado a la reforma?

Él mostró preocupación por los estudiantes de la universidad Telesup. Y lamentablemente no pudimos dar una opinión favorable, porque consideramos que Telesup es una universidad denegada que no tiene acceso a una prolongación de su tiempo de cese, ni a reincorporarse como tal al sistema, puesto que ha sido siempre rebelde a las decisiones que el consejo directivo de la Sunedu ha tomado. Es la única universidad denegada que no presentó plan de cese progresivo y ordenado, los convenios que tenía que firmar. Lo quiso hacer a última hora. Inicialmente lo único que nos hizo fue enjuiciarnos, interponer acciones de amparo en Bagua, Sullana, Lima. Juicios y demandas penales que el Poder Judicial los desestimó.

¿O sea, la única vez que se han reunido con el ministro ha sido para hablar de la Telesup?

Simplemente ver… probablemente en la preocupación que tenía de los alumnos de esta universidad que incluso le estaban haciendo una especie de protesta en la puerta del Minedu. Le dije que ese mismo grupo había ido a mi casa también a protestar con cartelones y gritos. Eso no debe ser lo que aliente una decisión, lo que debe alentar es la justicia, la verdad y lo que tenemos que hacer siempre es respaldar lo que tenemos como compromiso al haber asumido estos cargos.

¿Pero qué es lo que le pidió sobre la Telesup?

No necesariamente en forma directa, pero mostró su preocupación por los alumnos que estaban en la puerta del ministerio -que eran de la Telesup- protestando por su aparente desamparo.

¿Y no hablaron de ningún otro tema?

No hablamos de ningún otro tema. Quedamos en hablar, pero nunca más se pudo concretar.

Ahora, el Minedu dijo en su comunicado que defiende la autonomía de la Sunedu; sin embargo, existen aspectos de la reforma por mejorar. ¿Está de acuerdo con esta afirmación?

Diría que más bien valdría la pena que el Minedu nos diga qué cosa es lo que piensa que se debe mejorar. Nosotros estamos abiertos a cualquier cambio hacia adelante, no cambios hacia atrás, ni volver a situaciones ya superadas. El 2008, el TC declaró que era una situación inconstitucional la estructura de la educación superior por la mala calidad (…). Eso motivó a que ordene que se cree la superintendencia. O sea, la Sunedu se crea como producto del caos y si vamos a querer volver a los anterior seguramente vamos a tener que lamentar una situación de retorno a esas condiciones.

El Minedu también habla de estudiantes “desamparados”. ¿Acepta este término? Es similar a los argumentos de congresistas que respaldan estos proyectos

Me imagino que tienen alguna influencia de ese nivel, pero yo creo que lo de los estudiantes “desamparados” no es correcto que lo mencione el Minedu, porque los trabajos que hicimos en Sunedu con el ministerio ha sido justamente para aliviar la situación de los alumnos producto de la denegatoria. De los 250 mil alumnos, el 70% ha continuado sus estudios en la universidad denegada, las dos últimas promociones culminaron sus estudios, algunos se trasladaron. Pero existen 60.000 alumnos que son una preocupación genuina y debería ser también de la Dirección de Educación Superior Universitaria (Digesu) con la que hemos buscado soluciones con becas, ampliación de vacantes, 80 millones para ampliar presupuesto (…). Los alumnos que están aparentemente en ese bolsón de 60.000 los tenemos totalmente identificados, incluso, con su teléfono y estamos llamando constantemente para saber dónde están. La sorpresa es que muchos de ellos están en la universidad denegada que no nos dio el padrón, en institutos y algunos que sin necesidad de denegatoria ya habían decidido retirarse del sistema, como todo el tiempo sucede en las universidades (…)

Pero son 60.000, o sea un 30% de los que no se sabía nada…

Justamente lo que digo es que los tenemos identificados, los estamos llamando por teléfono y tenemos información de los cuales algunos han continuado su ruta de estudio y de otros no sabemos todavía, porque estamos haciendo una (búsqueda) de todos los estudiantes…

sunedu

“Es un golpe bajo e ilegal”

¿Cuál es el riesgo que enfrenta la reforma con los dictámenes que verá el Pleno?

En primer lugar, en el proyecto de recuperación de “autonomía” cambian el artículo 1 y 2 de la Ley Universitaria (...). Desconocen el rol rector del Minedu y las funciones que tiene. Ese es un golpe sumamente bajo e ilegal. A la Sunedu le quitan la calidad de organismo público, técnico, especializado encargado de la regulación y adscrito al Minedu. Lo dejan en el aire, sin capacidad de tener un vínculo con el sector (…). Otro aspecto fundamental es que cambian la estructura del consejo directivo, que en la actualidad es plural y con profesores principales que ya provienen de universidades públicas y privadas (…). Lo que proponen es que los rectores elijan a sus representantes. Los actuales provienen de las universidades a través de concursos públicos. Cuando alguien es representante, se debe a quien representa y lógicamente va a tener una autonomía menor para actuar y decidir. Los regulados se convierten en reguladores.

¿Cómo se pueden “romper” esas trabas administrativas y presupuestales a las que aluden rectoras como la de San Marcos, quienes señalan que así pierden autonomía y están “amarrados” al Minedu?

Yo lamento mucho las palabras de la rectora de San Marcos. Está justamente asumiendo la gestión de la universidad más importante de las públicas en el país. Pero decir que no tienen autonomía, porque le echan la culpa a la Sunedu, es una aberración en los conceptos que ella tiene. No conoce, entonces, lo que significa la autonomía universitaria frente a la Sunedu. Cuando ella fundamenta su autonomía no es contra la superintendencia, sino contra el Minedu, que es el que aparentemente le quita la autonomía. Ella lo que quiere tener es autocracia. En cualquier instancia público o privada hay alguien que tiene que mirar que se actúe correctamente. En universidades públicas es el Estado el que debe controlar. En las privadas, tanto asociativas como societarias son los órganos de gobierno o los que las patrocinan. La Sunedu es la responsable de que se cumpla la Ley Universitaria.

¿Cree, entonces, que las propuestas legislativas más que sustentos técnicos tienen sustentos políticos?

Me imagino que tiene fundamentalmente sustentos políticos. Lamentablemente la imagen que dejaron y seguramente todos vieron en esa sesión de la Comisión de Educación fue muy lamentable por decir lo menos. Hubo una total confusión, una cantidad enorme de acusaciones, diatribas, distorsiones de lo que existe en la realidad, que no augura que esto sea una cuestión técnica sino política, con intencionalidad a destruir lo único que se ha avanzado probablemente dentro de las políticas de Estado que tenemos.

¿Y detrás también estarían los conflictos de intereses o los vínculos de los congresistas con determinadas universidades?

Si uno tiene en mente la cantidad de dinero que se mueve en el sistema universitario puede inferir que hay conflicto de intereses básicamente económicos. El presupuesto de ingreso del sistema universitario es de 27.000 millones de soles al año, incluido el de las universidades públicas, pero, el gran porcentaje está en las privadas, tanto asociativas como societarias. Y ahí es donde uno puede inferir que ha habido grandes fortunas que se ha hecho a amparo de la educación, donde el objetivo principal de estas instituciones no ha sido la calidad, sino el negocio, el lucro (…)

¿O sea, los congresistas se están prestando a un juego de intereses que hay detrás de las universidades?

Es una posibilidad. Yo no la puedo afirmar, pero uno tiene que inferir qué está pasando detrás de esto, porque esto realmente es preocupante.

Ha visto que se logró consenso incluso de partidos políticos opuestos.

Sí, lamentablemente, personas que yo consideraba de gran nivel están firmando estas propuestas. Consideraba que eran autónomos en sus decisiones, que tenían una trayectoria profesional e incluso en las FFAA y que podíamos tener un respaldo diferente, pero no ha sido así.

Ministro de Educación

“Los congresistas están poniendo como pretexto a los estudiantes”

¿Dentro de los riesgos del proyecto para reconformar la Sunedu estaría que las mismas universidades denegadas puedan elegir al superintendente? Porque el proyecto dice que privadas y públicas pueden poner a sus representantes.

Dicen que tengan rector. Cualquiera pueda ser: públicas, privadas, licenciadas y denegadas, porque la razón social de las universidades licenciadas o denegadas todavía existe. Hay reconocimiento de un rector de una universidad denegada porque tiene que mantenerse la actividad académica como es uno de los requisitos.

¿Cree que detrás de estas iniciativas, como lo señalan los congresistas, hay interés por los estudiantes?

Están poniendo como pretexto a los estudiantes, pero no creo que se hayan preocupado por ellos (...). No es la Sunedu la que cierra universidades, es la universidad que debe asumir su responsabilidad de no cumplir con las condiciones básicas. Y eso debería ser motivo de investigación: ¿Por qué están así? Digamos que las universidades son responsables de que estos alumnos salgan con muy mala preparación y nosotros tenemos que asumir el fin superior que es que tengan una educación de calidad.

¿Pero también reconoce que hay aspectos por mejorar? Hay estudiantes que están en contra del ANR, pero señalan que tampoco han recibido apoyo de la Sunedu, que los han atendido un año después…

Sí creo que hay muchas cosas que se pueden mejorar si el sistema estuviera bien, porque muchas acusaciones se hacen a la Sunedu, pero las responsabilidades nacen en las universidades. Hemos tenido alrededor de 5.000 denuncias este año. ¿Cuáles son las principales? Que no tiene el grado registrado. ¿Por qué no lo tiene? Porque la universidad no lo da oportunamente. También problemas de gestión, pensiones (...). La Sunedu procesa las denuncias y trata de dar solución. Muchas veces demora porque las universidades no responden…

Usted habló de un “espectáculo lamentable y pobre en la Comisión de Educación”. ¿Cree que en el Pleno pasará lo mismo?

Confío en que no porque ahí seguramente los intereses que en este momento están enarbolando los miembros de la Comisión de Educación se tienen que diluir y se tiene que demostrar, a través de congresistas autónomos e independientes, que realmente aman la educación como fin superior. Espero que así sea.

¿Se mantendrá hasta el 2023, que es el periodo de vigencia de su cargo?

Yo no estoy defendiendo mi cargo, porque está sujeto a muchas situaciones... Pero el Minedu me propuso en su momento y fui designado por una resolución suprema. Si quieren vacarme, la Ley Universitaria establece las condiciones. Si demuestran que he actuado inadecuadamente o en contra de la ley, daría un paso al costado; si no, espero que me subroguen si desean, pero con la frente en alto, de que no hemos cumplido absolutamente nada en contra de la ley y los fines de Sunedu.