Otra vez el miedo rondó en la selva. Un terremoto de magnitud 7,5 en el distrito de Barranca, provincia loretana de Datem del Marañón, causó daños en diversas regiones del país, incluso en países vecinos del norte.
“Estaba descansando y ni bien sentimos el temblor levanté a mi esposa y a mi niño. Luego cargué a mi bebé y le dije a mi esposa que corriera. Así salimos a la sala de la casa justo cuando la pared se derrumbó de repente. En ese rato, yo solo me agarré de una columna, cerré mis ojos, abracé a mi familia, y dije: ‘Que sea lo que Dios quiera’”.
Ayuda. Decenas de familias fueron afectadas debido al colapso de viviendas. Foto: difusión
Este es el testimonio de un poblador de la ciudad de Moyobamba (San Martín) que se salvó de morir junto con su familia tras el movimiento telúrico que ocurrió a las 5:52 a.m. a 98 kilómetros al este de Santa María de Nieva, provincia de Condorcanqui, en la región Amazonas, según el Instituto Geofísico del Perú (IGP).
La gran profundidad de 131 kilómetros del temblor provocó que la onda sísmica alcance la zona norte y central donde también remeció por varios segundos, incluidos Loreto, Lambayeque, Cajamarca, San Martín, La Libertad y Lima.
Incluso pasó las fronteras llegando a Colombia y Ecuador, donde las autoridades de ambos países confirmaron daños materiales en sus provincias.
Según el presidente ejecutivo del IGP, Hernando Tavera, este episodio telúrico es el de mayor magnitud registrado este año y supera a los suscitados en Mala (6,0) el 22 de junio y Sullana (6,1) el 31 de julio pasado.
Transporte. Las carreteras en Amazonas sufrieron daños por la caída de rocas tras el sismo. Foto: difusión
El temblor dejó 636 damnificados, 2.202 afectados, 12 heridos; así como 17 viviendas destruidas, 110 inhabitables y 408 viviendas afectadas. Asimismo, se reportaron seis escuelas afectadas, un centro de salud destruido y dos templos destruidos, según el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).
El gerente municipal de Chachapoyas, Marcelino Cruz, manifestó que se reportó una víctima indirecta tras el sismo: una mujer que murió de un infarto.
Debido a estos daños, el presidente Pedro Castillo llegó al distrito de La Jalca, provincia de Chachapoyas —donde se informó que el 70% de sus viviendas presentaban daños— para realizar la inspección respectiva con sus ministros de Transportes, de Vivienda y de Defensa.
La Jalca. Hombre es rescatado por pobladores de la zona. Foto: difusión
En su visita llamó a la población para que dejen sus viviendas tras el riesgo de más réplicas. Los pobladores visiblemente afectados pidieron ayuda y Castillo se comprometió en la reconstrucción de sus casas y aseguró que no descansará “hasta que la población tenga la seguridad de estar en sus hogares de forma tranquila”.
En esa zona, la reconocida torre de la iglesia de La Jalca Grande, que data del siglo XVI (1538) y que es considerada Patrimonio Histórico del Perú, se derrumbó a causa del sismo. Este templo católico es el más antiguo de Amazonas. Las autoridades lamentaron este hecho.
Patrimonio. Torre de iglesia La Jalca Grande terminó destruida. Foto: difusión
Otra joya histórica como la fortaleza de Kuélap no sufrió daños aparentemente. Y es que en una inspección preliminar al principal atractivo turístico, el director del Dirección Desconcentrada de Cultura de Amazonas, Peter Lerche, señaló que Kuélap no sufrió daño alguno, pese a su estado vulnerable.
Durante la mañana hubo problemas en la comunicación con las comunidades por falta de carretera y energía eléctrica.
El alcalde de Santa María de Nieva, Héctor Requejo, señaló en TV Perú que no contaba con un reporte porque no existía comunicación con las 333 comunidades nativas y que una de las dificultades eran las lluvias que podrían ocasionar derrumbes.
Se debe indicar que Santa María de Nieva, capital de Condorcanqui (Amazonas), es una de las provincias con mayor población awajún y que tiene altos índices de violencia sexual escolar, embarazos adolescentes y suicidios de mujeres. Esto demuestra un abandono histórico del Estado.
Pues bien, después de Amazonas, otras regiones que registraron más daños materiales, según Indeci, fueron Cajamarca con 170 damnificados, cinco viviendas destruidas, 30 viviendas inhabitables; y San Martín con 143 damnificados, 33 viviendas inhabitables, entre otros.
El terremoto causó la caída de rocas en la carretera Chachapoyas-Pedro Ruiz Gallo, también en la carretera que conduce de Chachapoyas a Rodríguez de Mendoza.
Según el Ministerio de Educación (Minedu), trece escuelas de Amazonas, Loreto y Piura resultaron afectadas por el temblor. Los especialistas llegaron a las zonas afectadas verificando los daños para las acciones.
El viceministro de Prestaciones y Aseguramiento en Salud del Ministerio de Salud (Minsa), Augusto Tarazona, informó que 16 establecimientos de salud sufrieron daños debido al terremoto en Amazonas.
El sismo también tuvo otro rostro, el de solidaridad. Un sobreviviente fue rescatado con vida en medio de los escombros de madera y adobe de una construcción en Cuaiqueta, anexo del distrito de La Jalca.
Inspección. Presidente Castillo prometió reconstrucción de residencias. Foto: Presidencia
La premier Mirtha Vásquez indicó que el Gobierno evalúa la declaratoria de emergencia en ciertos sectores por el movimiento sísmico.
“Nos están solicitando evaluar la declaratoria de emergencia para determinar los lugares. Eso estamos trabajando para ver si amerita y para que esto facilite la atención sobre todo a las personas y familias que necesitan ayuda”, manifestó.
Ayer, a la 1:32 a.m., también se registró otro sismo de magnitud 5,2 en el Callao.
Tania Pariona, excongresista indígena
Cuando ocurren fenómenos naturales o pandemias, no hay un enfoque claro del Estado de cómo llegar a las comunidades y pueblos indígenas. Lo complicado es que no hay conectividad ni vías de comunicación terrestres y aéreas, como en el caso de Santa María de Nieva, en Amazonas, donde ocurrió el sismo y donde viven, sobre todo, los hermanos awajún y wampis. Allí la situación es bastante limitada y toda la burocracia estatal ocasiona que la ayuda y la atención lleguen después de lo ocurrido.
Por eso, lo que se debe hacer de manera urgente es que se tome contacto directo con las autoridades y los líderes de las comunidades indígenas para agilizar la atención humanitaria y todo lo referido a salud, vivienda y alimentación.
Lamentablemente, las comunidades indígenas están alejadas; son como el último rincón del Perú. Debido a esa situación, los hermanos de la Amazonía exigen la presencia del Estado. Esperemos que no queden en el olvido después del sismo.
Por Carlos Zavala, director de Cismid
Generalmente por la selva, en las provincias de Amazonas, en Lamas y en Chachapoyas, los suelos son flexibles y arcillosos y se caracterizan por tener temblores con un periodo largo. Esto amplifica más la onda sísmica, entonces lo que hace es que se sienta con más fuerza el remezón.
Eso sí, a la hora de vibrar los sismos no son tan ruidosos como los que sentimos cuando son frente a la costa, como el que ocurrió horas antes en el Callao. Este tuvo un ruido fuerte, pero fuera de eso el movimiento fue de periodo corto o sea fue chiquito; sin embargo, lo de Amazonas fue un balanceo, debido a que fue un periodo largo.
Ahora, si hablamos de Lima, por ejemplo, hay suelos que son buenos, muy duros, como los del centro de Lima, pero si nos vamos a los extremos, como para el lado de Ventanilla, Callao o, por el otro lado, a Villa El Salvador y Chorrillos, ahí los suelos son flexibles y arcillosos. Por eso urge saber dónde aceptamos asentamientos humanos para evitar tragedias.
Infografía-La República