Autoridades del Ministerio de Salud (Minsa) confirmaron que un comité especializado decidió aprobar la administración de una tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus. De esta forma, el Perú se une a la lista de países que decidieron colocar una aplicación de refuerzo a determinados grupos que se encuentran más expuestos al virus o que son más susceptibles a enfermarse gravemente o morir en caso de infectarse.
La posibilidad de una tercera dosis no es un tema que recién se debate, pues en meses anteriores gremios de profesionales de la salud, como el Colegio Médico del Perú (CMP), solicitaron la tercera dosis argumentando que sería una manera de aumentar la protección del personal de primera línea que se dedica a atender a los pacientes con COVID-19.
Por su parte, el ministro de Salud, Hernando Cevallos, recalcó que la tercera dosis no significa que las vacunas antes aplicadas no sean efectivas, ya que, al contrario, ayudaron a evitar muchos decesos.
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“Hay consenso dentro de los científicos nacionales y los colegios profesionales de que la vacuna que se aplicó al personal de salud, la vacuna Sinopharm, ha dado resultados, ha sido muy buen esta vacuna y nos ha permitido bajar sustancialmente la cantidad de hospitalización y de muerte de los trabajadores del sector salud y de varios sectores de las Fuerzas Armadas. Todas las vacunas que usamos en el país tienen una eficacia debidamente comprobada”, mencionó en declaraciones a la prensa, tras participar en el Consejo de Ministros.
El comité de expertos convocado por el Minsa decidió que la tercera dosis estará dirigida a aquellas personas que se encuentran expuestas al contagio por SARS-CoV-2, como son los trabajadores de salud, especialmente aquellos que laboran en hospitales y tienen contacto con personas infectadas.
Posteriormente, vacunarían al resto que trabaja en otras profesiones del sector salud. No obstante, a la fecha, no se ha aclarado si todos los considerados “en primera línea” recibirán la tercera dosis, es decir, policías, miembros de las Fuerzas Armadas, bomberos, trabajadores de limpieza, entre otros.
Pero no solo será para quienes laboran en áreas sanitarias, sino también para personas inmunodeprimidas, es decir, que no desarrollan los suficientes anticuerpos contra el virus con solo dos dosis.
“(Se va a aplicar la tercera dosis) a esos trabajadores porque es valioso lo que hacen, no solo porque hay que respetarlos como cualquier ciudadano peruano, sino porque, además, son los que protegen la vida de la ciudadanía; por tanto, hay que cuidarlos. Entonces se ha hecho una evaluación para ellos y para las personas que son muy mayores o tienen comorbilidades, lo cual no les permite tener los niveles de defensas que quisiéramos”, dijo el ministro de Salud.
El viceministro de Salud Pública, Gustavo Rosell, precisó que dentro de este último grupo se considerarán a los grupos priorizados que se tomaron en cuenta en los primeros meses de vacunación. Entre ellos están adultos mayores de 65 años, personas con comorbilidades, personas con síndrome de Down, pacientes con trasplante de órgano o que se encuentren en la lista de espera, entre otros.
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Cuando el CMP planteó la posibilidad de una tercera dosis, la gestión del exministro de Salud Óscar Ugarte mencionó que aquello estaba descartado por no existir evidencia científica acerca de que su aplicación elevara el porcentaje de protección frente al SARS-CoV-2.
No obstante, meses después, el actual titular del Minsa, Hernando Cevallos, aseguró que ya hay algunos indicios de que la tercera dosis aumenta el nivel de anticuerpos, los cuales disminuyen conforme va pasando el tiempo después de la segunda dosis.
“Distintos estudios nos señalan que la efectividad de las vacunas con el tiempo desciende levemente, no de manera abrupta, y tenemos sectores que están en permanente contacto con pacientes COVID-19, que están enfrentados a una carga viral durante muchas horas, y son justamente los trabajadores de la primera línea”, dijo el funcionario.
El comité que decidió administrar la tercera dosis, el cual está conformado técnicos, epidemiólogos, infectólogos, científicos y otros especialistas, mantendrá otras reuniones con autoridades del Ministerio de Salud a fin de definir los protocolos, así como el resto de detalles.
El viceministro Rosell adelantó que los protocolos estarían listos para la siguiente semana. Asimismo, La República pudo conocer que la aplicación de la tercera dosis iniciaría en simultáneo con la inmunización a todos los mayores de 18 años en Lima y Callao. Es decir, hay altas probabilidades de que sea a comienzos de octubre.