Cusco. El juez Wilbert Bustamante escuchó ayer los argumentos de la empresa R&G SAC, constructora del hotel Sheraton, y la Comisión de Juristas a propósito de la acción de amparo que busca la demolición de la edificación.
A Bustamante le toca la tarea de dirimir la decisión que generó tres vertientes. Una del juez Fernando Murrillo que señala que no se puede proteger el patrimonio con una acción de amparo; la otra es avalada por los jueces Yuri Pereira y Yenny Delgado Aybar que fallaron diciendo que se confirme sentencia que reconoce el daño patrimonial, pero que este no puede repararse, por ende, no habría lugar a la demolición. Y la tercera vertiente, que apuesta por la demolición de la construcción, es apoyada por los jueces Franklin Gutiérrez Merino y Dafne Barra Pineda.
Para hacer una resolución en una Sala Civil se requiere de tres votos. Bustamante, por ende, tiene la opción de respaldar alguna de las opciones y así resolver este caso. Es posible que en una semana haya resolución.
Lo más importante de la audiencia de ayer es que la Dirección Desconcentrada de Cultura y la Municipalidad Provincial del Cusco se adhirieron a la pretensión de la Comisión de Juristas para demoler el Sheraton. Mientras que el asesor legal de la empresa R&G, encargada de la construcción del Sheraton, Hugo Ccorimayta, pidió que se apoye el fallo de Fernando Murillo, o sea que se declaré infundado el amparo.
En tanto, por la mañana hubo un plantón en el Paraninfo Universitario de la Plaza Mayor del Cusco. Una veintena de ciudadanos exigía que la edificación sea demolida. Asimismo, antes de la audiencia, a las tres de la tarde, hubo otra protesta en el frontis de la Corte Superior de Justicia.