El politólogo Javier Gonzáles-Olaechea considera que el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) debería precisar si los exintegrantes del Congreso disuelto podrán participar en los comicios para el nuevo Parlamento. Además, critica la alianza electoral entre Verónika Mendoza y Vladimir Cerrón.
¿Qué es lo que más le preocupa de este proceso electoral?
Mi primera preocupación, y creo que es un sentir nacional, es que el JNE está demasiado perezoso. Es el único que puede resolver y darle claridad a la ciudadanía: ¿pueden los excongresistas ser reelegidos?
¿Cómo perjudicaría a los comicios de enero?
¿Qué pasará? Se presentan algunos excongresistas a la reelección. Y en el caso individual (ante las tachas), el Jurado Especial Electoral de Puno, por ejemplo, le dirá a uno que sí y el de Lima le dirá a otro que no. Eso va a generar anarquía. Yo invitaría al JNE a que fije su criterio dentro del marco constitucional y conforme al referéndum. No podemos estar en el limbo.
En Fuerza Popular, algunos exlegisladores expresan que la no reelección recién aplica desde las elecciones del 2021.
La Constitución es muy clara: cuando dice que se disuelve el Congreso, se producen elecciones complementarias para uno con nueva composición.
¿Cree que el próximo Congreso sea peor o mejor?
Aquí hay una corresponsabilidad del elector que no se informa. Pero sí creo que el ciudadano está cada día más consciente de lo que no quiere en el Congreso.
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¿Es optimista en que , luego de la disolución del Parlamento, afloren nuevos líderes políticos? ¿O no?
Hay gente valiosa, pero no encuentro conductores. Los líderes nacen. El pueblo y los distintos estamentos se van identificando con los que ofrezcan una visión del país conectada a nosotros. Y el elector no perdona el pasado.
¿Qué falta para esa renovación de la clase política?
Hay la necesidad de que los partidos tengan democracia interna abierta y, así, puedan gestar conductores.
¿Le interesa postular al Congreso?
Me interesa la realidad del país y los asuntos públicos. No tengo ninguna invitación.
¿Qué le parece la alianza electoral que se acaba de producir entre Verónika Mendoza y Vladimir Cerrón?
En política, lo que aprecia la gente es la coherencia. Si el señor Cerrón ha ido a aplaudir las tropelías de Nicolás Maduro, no solo es vergonzoso, sino inaceptable. La señora Verónika Mendoza debió haber evaluado bien con las capacidades que tiene. Es una factura muy grande que pagará.
¿Nuestra democracia se vio afectada con la disolución del Congreso?
Nuestra democracia es representativa y de baja intesidad. Hay un régimen de libertades. Los peruanos no estamos acostumbrados a valorar la potencialidad de la democracia.
¿Cree que en nuestro país puede suceder un conflicto social similar al de Chile?
Sí. Es algo cíclico en la historia humana. Cada 25 años, luego de un estado de bonanza, viene una explosión porque hay un sector de la población que no se siente escuchado y atendido.