La lava del volcán Cumbre Vieja que entró en erupción hace 11 días en la isla española de La Palma llegó finalmente al mar durante la noche del martes y este miércoles, generando gases potencialmente tóxicos, aunque de momento solo implica un riesgo “menor” para la población.
“Tenemos ahora mismo metido un viento importante en la zona que disipa más esa columna (de gases) hacia el mar, por lo tanto, el riesgo es muchísimo menor”, señaló a la radio pública Rubén Fernández, director técnico del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca).
Las imágenes de AFPTV mostraban la mañana de este miércoles las grandes columnas de vapor y gases que se elevaban cuando la cascada de lava ingresaba al mar en la costa oeste de la isla del archipiélago atlántico de Canarias, en España.
El impacto de la lava, a más de mil grados, del volcán Cumbre Vieja con el agua del océano se produjo finalmente a las 23.00 horas (horario local) del último martes, un momento temido desde hace días por la posibilidad de que se generaran explosiones, gases tóxicos y olas de agua hirviendo.
Como medida preventiva, los vecinos de las zonas más cercanas habían sido confinados desde el lunes 27 de septiembre para evitar que entraran en contacto con los gases.
“Ahora mismo no tenemos ningún indicio que nos haga pensar que sea peligroso para las personas que están en el confinamiento, ni para los equipos de emergencia, que también respetan los perímetros de seguridad”, señaló Rubén Fernández.
El Gobierno de Canarias ha establecido un perímetro de 3,5 kilómetros de distancia en tierra y de 2 millas náuticas en mar del punto de la entrada de lava al agua, que consideran suficiente para garantizar la seguridad de las personas.
“La inhalación o el contacto con gases ácidos y líquidos puede irritar la piel, los ojos y el aparato respiratorio y causar dificultades al respirar”, advirtió el Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN).
Por la erupción iniciada el 19 de septiembre, más de 6.000 personas tuvieron que abandonar sus hogares, pero hasta el momento no ha habido heridos ni muertos, aunque sí graves daños materiales.
La llegada de la lava del volcán Cumbre Vieja al mar en la isla La Palma. Foto: captura-Infobae
La lava ha arrasado ya 656 edificaciones -no todas viviendas- y cubierto 268 hectáreas en esta isla de 85.000 habitantes que vive del cultivo del plátano y del turismo, según el sistema de medición geoespacial europeo Copernicus.
“En toda esa extensión no queda nada más que lava, el paisaje será otro, la devastación es tremenda (…) La isla de La Palma en esa zona es otra isla”, se lamentó el presidente regional canario.
El martes 28 de septiembre, el Gobierno español aprobó un paquete de ayudas directas de 10,5 millones de euros (12,2 millones de dólares) para proporcionar viviendas y útiles de primera necesidad a quienes perdieron todo por la erupción.
Más imágenes de la llegada de la lava del volcán al mar. Foto: captura / Infobae
Los expertos calculan que la erupción puede durar varias semanas, incluso algunos meses.
Las dos erupciones precedentes en La Palma ocurrieron en 1949 y 1971. Estas provocaron la muerte de tres personas en total, dos de ellas por inhalación de gases.
Con información de AFP