El viernes 3 de septiembre se hizo pública la resolución de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) en la cual se habilitó que el presidente de turno pueda entrar en la competencia por una reelección inmediata.
El fallo emitido ordena que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) debe permitir “que una persona que ejerza la Presidencia de la República y no haya sido presidente en el periodo inmediato anterior participe en la contienda electoral por una segunda ocasión”.
Esto significa que si Nayib Bukele hubiese sido presidente en el periodo 2014-2019, no podría participar en el periodo 2024-2029, pues para los jueces es totalmente legítimo que un persona se reelija siempre y cuando no esté más de diez años en el mandato. “Ilegítimo sería promover la continuidad del presidente o una reelección más allá de los 10 años; es decir, más allá de dos períodos”, mencionaron.
No obstante, uno de los requisitos que se puntualizó en el último fallo es que, en caso de una futura reelección por parte de Bukele, este estará obligado a solicitar una petición de licencia para que pueda realizarse propaganda electoral durante la campaña.
Un grupo de salvadoreños se manifestó en las calles en contra de la implementación del bitcoin como moneda de intercambio oficial en el país y, además, denunció persecución política contra personas críticas del Gobierno de Nayib Bukele, a quien tildaron de “fascista”. Las protestas sucedieron una semana antes de que El Salvador se convierta en el primer país del mundo en el que el bitcoin se inserte al mercado como moneda legal.
Concentrados en el Monumento a la Constitución en San Salvador, los jóvenes condenaron la detención de Mario Gómez, un especialista en informática y criptomonedas que está en contra de la incorporación de dicho elemento.