Este martes 17 de agosto, la organización Movimiento por la Integración y Liberación Homosexual (Movilh) emitió un requerimiento a la Cancillería de Chile para otorgar salvoconductos a afganos de la comunidad LGBTQ+, de manera que huyan de Afganistán y viajen al país sudamericano para recibir asilo.
“Elevamos una solicitud a la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Carolina Valdivia, para que el Gobierno de Chile otorgue a los afganos y afganas pertenecientes a la comunidad de la diversidad sexual salvoconductos que les permitan desplazarse de manera segura a nuestro país y encontrar asilo”, señaló a Sputnik Óscar Rementería, vocero del organismo.
La idea surge en medio de los acontecimientos en Afganistán y la toma de Kabul por parte del movimiento Talibán (proscrito en Rusia). Si bien las personas de la diversidad sexual siempre han sido discriminadas en ese país, con el avance de la ocupación talibán existe el riesgo de una “matanza generalizada”, afirmó Rementería.
“Aunque Afganistán siempre discriminó a las personas por su orientación sexual, los castigos eran de cárcel, o había menores penas para aquellos que mataban a una persona LGBTQ+, pero ahora la situación es mucho más compleja y se espera una fuerte y violenta represión de un Gobierno talibán contra estos grupos, posiblemente una masacre”, apuntó.
Aunque no existe una embajada chilena en Afganistán, el Movilh contactó con la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (ILGA, por su sigla en inglés) en Asia y solicitó que los afganos de la comunidad LGBTQ+ puedan ser trasladados a países cercanos como Emiratos Árabes o Pakistán y pedir un salvoconducto en las respectivas misiones diplomáticas chilenas.
“Me comuniqué con las autoridades del Departamento de Extranjería de Chile y me explicaron que, si estas personas logran ser trasladadas a Chile, una vez cruzando la frontera se les puede otorgar una visa en calidad de refugiado”, explicó.
Del 6 al 14 de agosto, el movimiento talibán se hizo con el control de todas las capitales provinciales y el día 15 entró en Kabul, tomando el poder en la ciudad, y de esa forma en todo el país.
La ofensiva de los islamistas rebeldes contra las tropas gubernamentales concluyó dos semanas antes de finalizar la retirada de Estados Unidos y sus aliados, tras dos décadas de presencia militar en Afganistán. El presidente afgano, Ashraf Ghani, abandonó el país y los talibanes afirmaron que aspiran a un traspaso completo y pacífico del poder.
Entre 1996 y 2001, lapso en que gobernaron los talibanes, los juegos, la música, las fotografías y la televisión estaban prohibidos. A los ladrones se les cortaban las manos, los asesinos eran ejecutados en público y se mataba a los homosexuales.
Las mujeres tenían prohibido trabajar y salir sin un acompañante masculino. Aquellas acusadas de adulterio eran azotadas y apedreadas hasta la muerte. Las niñas no podían ir a la escuela.
Los hombres debían llevar una larga barba, asistir a la oración bajo pena de ser azotados y tenían que vestir el atuendo tradicional, el shalwar kameez. El Ministerio para la Promoción de la Virtud y la Supresión del Vicio hacía reinar el terror.
Con información de AFP.