La expresidenta interina de Bolivia Jeanine Áñez y los exministros Álvaro Coímbra y Rodrigo Guzmán tendrán que cumplir prisión preventiva luego de que la jueza Regina Santa Cruz ordenara este domingo 14 de marzo cuatro meses en su contra.
La Fiscalía boliviana efectuó la solicitud de detención debido al riesgo de fuga de los tres, a quienes se les acusa por los presuntos delitos de “sedición, terrorismo y conspiración” durante la crisis de 2019 tras las elecciones que derivaron en la renuncia de Evo Morales al cargo de presidente.
Este domingo, la Fiscalía había pedido seis meses de prisión preventiva. En el documento, que firman tres fiscales, se aprobó la imputación para que se apliquen medidas cautelares como la detención por este lapso en cárceles de La Paz. Sin embargo, la jueza Santa Cruz consideró este tiempo como “excesivo”.
En la audiencia, que se extendió por aproximadamente diez horas, Áñez y y los extitulares de Justicia y Energía se encontraban en una oficina de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen. Poco después de conocerse la decisión, la exmandataria se pronunció vía Twitter.
“Como hemos denunciado, el MAS decide y el sistema judicial obedece: me envían cuatro meses detenida para esperar el juicio por un golpe (de Estado) que nunca ocurrió. Desde aquí llamo a Bolivia a tener fe y esperanza. Un día, entre todos, levantaremos una Bolivia mejor”, expresó.
Jeanine Áñez había sido detenida la madrugada del último sábado tras el pedido de la Fiscalía realizado un día antes. La Policía acudió a su vivienda en la ciudad de Trinidad; no obstante, finalmente fue encontrada en la vivienda de un vecino.
Al momento de su aprehensión, Áñez lo calificó como un “acto de abuso y persecución política” y acusó al Movimiento al Socialismo (MAS), partido del Gobierno y del expresidente Morales, de dirigir al país bajo una dictadura.