En Chile, una iglesia consumida por el fuego y otra muy dañada en las cercanías de la Plaza Italia de Santiago fue el resultado de ataques violentos por encapuchados durante una multitudinaria manifestación, que fue en un inicio pacífica, con motivo de conmemorar el primer aniversario del inicio de la revuelta social en el país sureño.
La pequeña iglesia de la Asunción se convirtió en el segundo templo en ser atacado durante esta jornada de protestas en la capital. Cuando cayó la cúpula en llamas tras el colapso de la estructura, varios manifestantes celebraron.
La estructura fue atacada por manifestantes encapuchados en momentos en que transcurrían varias horas de manifestación pacífica en los alrededores de la Plaza Italia, donde celebraron el inicio del estallido social del 18 de octubre de 2019.
Cuando la iglesia ardía, bomberos y rescatistas hicieron un cerco para evitar que el colapso de la estructura impactara sobre la gente.
“Que caiga, que caiga”, gritaron algunos encapuchados, que celebraron la posterior caída de la cúpula de la pequeña iglesia, conocida también como la “parroquia de los artistas”, según recuerda la prensa local.
El fuego fue controlado por los bomberos. Foto: Felipe Báez
Más temprano, muy cerca de donde se produjo este incendio, la iglesia San Francisco de Borja, que pertenece a los Carabineros, fue saqueada e incendiada, pero los bomberos lograron apagar las llamas sin que pasara a mayores.
La manifestación de este domingo 18 de octubre se produce a una semana del plebiscito en que los chilenos decidirán si cambian o no la Constitución que se mantiene como herencia de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990). El referéndum fue convocado tras un amplio acuerdo político alcanzado tras semanas de violentas protestas el año pasado.
Varias encuestas coinciden en que la opción para aprobar el cambio constitucional podría ganar con más del 60% de los votos, tras un año en que el reclamo por un mayor bienestar social tiene un respaldo transversal en la sociedad, así como también una contundente condena a la violencia en las calles.