En la actualidad, hay cuatro prototipos de vacuna contra el nuevo coronavirus que están en la fase más avanzada. Pero la desarrollada por la compañía Moderna y el Centro de Investigación de Vacunas de Estados Unidos destaca por haber sido la primera en probarse en humanos.
Tras una serie de ensayos con grupos de voluntarios, han salido a la luz los diversos efectos secundarios que estas personas padecieron después de recibir el compuesto vacunal que lleva información genética del virus.
La experiencia del estadounidense Ian Haydon, de 29 años, uno de estos voluntarios, fue recogida por el diario médico STAT.
Aproximadamente 12 horas después de recibir la segunda dosis, Haydon desarrolló fiebre alta (por encima de los 39,5 grados). Luego fue conducido a urgencias, donde fue debidamente atendido. Sin embargo, tras ser dado de alta y llegar a su casa, se desmayó.
Ian Haydon, voluntario de la vacuna de Moderna. Foto: STAT.
“Entiendo que compartir mi historia va a ser aterrador para algunas personas. Espero que no genere ningún tipo de antagonismo hacia las vacunas en general o incluso hacia esta vacuna”, dijo a CNN.
“Hay que encontrar una dosis (...) que produzca anticuerpos, pero que no provoque demasiados efectos secundarios”, destacó.
Otra institución que ya probó su compuesto en voluntarios es la Universidad Séchevoc, ubicada en Moscú (Rusia). El pasado 23 de junio, publicaron su informe sobre estos primeros ensayos en humanos.
De acuerdo al documento, 20 voluntarios que recibieron una sola dosis de la vacuna. Algunos de ellos experimentaron “reacciones mínimas”, como un ligero aumento de la temperatura corporal y dolor de cabeza. No obstante, el informe indica que estos síntomas dejaron de estar presentes después de 24 horas.