La muerte de una elefanta preñada por la explosión de petardos en su boca mientras comía frutos ha causado molestia y ha levantado la voz de protesta de los defensores de los animales en la Kerala, India.
Según informó el medio NDTV, la paquidermo había caminado hasta un pueblo cercano al Parque Nacional del Valle del Silencio y encontró una plantación de piña. Sin embargo, al comer uno de los frutos explotó dentro de su boca debido que los dueños del sembradío habían colocado la granada con el fin de evitar que los animales se coman su cosecha.
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“La piña llena de petardos explotó en su boca, causándole graves heridas. Fue un acto intencional matar a la elefanta”, dijo a la AFP Surendra Kumar, alto responsable de la protección de la fauna de Kerala.
El caso causó indignación los defensores de los animales y del propio primer ministro Pinarayi Vijayan.
Kumar indicó que los aldeanos de la zona usualmente utilizan frutas amañadas para proteger sus cultivos de la fauna silvestre. Otros utilizan fuegos artificiales o vallas electrificadas para desviar a los elefantes de sus cosechas.
No es la primera vez que sucede un evento similar. El mes pasado ya se había producido un incidente, dijo Surendra a la AFP.
El mes pasado otro animal murió en similares circunstancias.
El primer ministro Pinarayi Vijayan prometió medidas estrictas contra las personas responsables. Según la Ley de Protección de la Vida Silvestre, capturar, atrapar, envenenar o hostigar a cualquier animal salvaje o incluso intentar hacerlo conlleva una multa de hasta $ 25.000 o una pena de prisión de hasta siete años, o ambos.
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El oficial del bosque que publicó el asunto en Facebook, dijo que la elefanta, con sus entrañas rasgadas, con la lengua y la boca lesionadas, había deambulado durante días antes de caminar hacia el río Velliyar en el distrito de Palakkad, donde murió de pie.
La extensión de la presencia humana en India provoca regularmente incidentes con la fauna silvestre local, que ve su territorio y su entorno recortados poco a poco.