El alcalde de la ciudad de Alton, Illinois (Estados Unidos), solicitó a la policía que fuera más estricta con las fiestas y reuniones sociales en su localidad, que estaban prohibidas por orden estatal como medida de prevención ante el coronavirus. Sin embargo, los agentes encontraron en uno de estos eventos a la esposa del burgomaestre y la detuvieron por el hecho.
Brant Walker, alcalde de la citada localidad, se dirigió el sábado a sus conciudadanos, invocándolos a permanecer en sus viviendas para evitar el contagio con el COVID-19. “Padres, por favor mantengan a sus hijos en casa, hacerlo es vital para nuestra salud”, señaló, de acuerdo con el portal The Huffington Post de Estados Unidos.
PUEDES VER Colombia: trabajadoras sexuales venden frutas y verduras ante la falta de ingresos [VIDEO]
Como parte de estos esfuerzos de prevención, el burgomaestre solicitó a la policía que hiciera cumplir con más firmeza la orden dada por el gobernador de Illinois para mantener el distanciamiento social durante la pandemia del coronavirus, lo que incluía la prohibición de reuniones sociales.
No obstante, la esposa del alcalde participó en una de estos encuentros, organizada el domingo por la mañana en un bar del lugar. Enterada del hecho, la policía acudió al sitio y puso fin al evento. Todos los participantes, entre ellos la mujer, recibieron citaciones por conducta imprudente.
El propio alcalde dio a conocer, a través de una publicación de Facebook, que su mujer estuvo entre los involucrados, por lo que pidió disculpas a los ciudadanos.
“Mi esposa es una persona adulta capaz de tomar sus propias decisiones, y en este caso exhibió una sorprendente falta de juicio”, manifestó.
Estados Unidos ha sobrepasado los 396 000 infectados con el nuevo coronavirus. Algunos de sus habitantes no se han tomado en serio esta pandemia, como un joven que se grabó en una fiesta al aire libre.