El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, lanzó el domingo un llamado mundial a proteger a las mujeres “en sus propios hogares”, en momentos en que las medidas de confinamiento provocadas por la pandemia de coronavirus (COVID-19) exacerban la violencia contra la mujer y en las familias.
“En las últimas semanas, con el aumento de las presiones económicas y sociales y del miedo, hemos visto un estremecedor repunte global de la violencia doméstica”, dijo Guterres en un comunicado. “Así que hoy hago un nuevo llamamiento a la paz en los hogares de todo el mundo”.
“La paz no es solo la ausencia de guerra. Muchas mujeres bajo encierro por coronavirus (COVID-19) enfrentan violencia donde deberían estar más seguras: en sus propios hogares”, agregó el funcionario.
En ese sentido, instó a los gobiernos “a que pongan la seguridad de las mujeres primero mientras responden a la pandemia”.
Días atrás, Guterres estimó que el coronavirus (COVID-19) es la peor crisis global desde la Segunda Guerra Mundia.
Interrogado en un encuentro con medios sobre por qué consideraba que la actual es “la peor crisis mundial desde que la ONU fue fundada” -hace 75 años-, Guterres respondió: “se trata de una combinación, por un lado, de una enfermedad que es una amenaza para todos en el mundo, y en segundo lugar, porque tiene un impacto económico que traerá una recesión sin precedentes en el pasado reciente”.
"La combinación de esos dos factores y el riesgo de que contribuya a una creciente inestabilidad, una creciente violencia y un creciente conflicto son las cosas que nos hacen creer que esta es, de hecho, la más retadora de las crisis que hemos enfrentado desde la Segunda Guerra Mundial", explicó.
Para Guterres, “la humanidad está en juego”, pero la comunidad internacional aún está lejos de la solidaridad necesaria para enfrentar la situación porque hasta ahora los países desarrollados sobre todo están actuando para sostener sus economías.