Marcelina Cruz, madre de Gladis Giovana Cruz Hernández, la presunta feminicida de Fátima, anunció que pedirá a las autoridades del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) la custodia de sus nietos, pues asegura, no estarían bien cuidados por la familia de Mario Alberto Reyes Najera, padre de los menores.
Como se recuerda los tres menores hijos de Giovana y Mario están bajo custodia de sus abuelos paternos desde la semana pasada por decisión del DIF, la Subprocuraduría de Atención a Víctimas del Delito y Servicios a la Comunidad, y la secretaría de mujeres.
Claudia Sheinbaun, gobernadora de Ciudad de México, aclaró que no existió ninguna violación durante el proceso de la entrega de los niños a los padres de Mario Alberto.
Sin embargo, la asesora jurídica de la abuela, Angélica Urbina, ha refutado lo dicho por Sheinbaun y ha pedido que las autoridades demuestren cuál fue el criterio para la entrega de los tres menores a los abuelos paternos, ya que “no habrían hecho diagnósticos en ambas familias”.
Angelica Urbina, también confirmó su alejamiento como defensa de la presunta pareja feminicida ante las amenazas de muerte emitidas contra su persona, y que solo se encargará de asesorar jurídicamente a Marcelina Cruz.
La exabogada de Giovana Cruz afirmó, al portal web Milenio, que la línea de su expatrocinada se sustenta en que ella era víctima de violencia familiar que fue denunciada hasta en tres ocasiones ante el Ministerio público, pero hicieron caso omiso.
Según Marcelina Cruz, su yerno Mario Alberto intentó prenderle fuego a Giovana hasta en tres ocasiones.