Un inesperado evento aterrorizó a los pasajeros de la aerolínea Aeroflot Airbus 320 con destino al resort Anapa, en el Mar Negro, ante el aterrizaje forzoso que se realizó por el ataque al corazón que sufrió el piloto de la aeronave cuando se encontraban a 33 mil pies de altura.
El hombre de 49 años de edad, trabajador de la empresa aérea estatal rusa realizaba un vuelo domestico desde Moscú, Rusia. Sin embargo, tuvo que descender de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Platov en Rostov-on-Don, ante su delicado estado de salud.
Al llegar a tierra, los paramédicos le brindaron asistencia hospitalaria al piloto, pero lamentablemente falleció en el terminal aéreo a pesar de los esfuerzos para salvarle la vida.
“Una azafata corrió a través del avión preguntando si había un médico porque uno de los miembros de la tripulación se sentía mal”, declaró una pasajera a la agencia rusa RIA Novosti.
La causa de la muerte no está clara, pero se cree que fue un ataque cardíaco o un coágulo de sangre. Una fuente le dijo a RIA Novosti que el piloto se había quejado antes de tener dolor en el pecho.
Los servicios del aeropuerto informaron que ningún pasajero resultó herido en la emergencia y proporcionaron toda la ayuda necesaria. Prepararon el avión para el despegue al aeropuerto de destino.
Aeroflot expresó sus condolencias a la familia y amigos del piloto. “Aeroflot expresa sinceras condolencias a las familias y amigos del piloto”, dijo el servicio de prensa de la compañía. Los representantes de la aerolínea también dijeron que se decidió aterrizar el avión en Rostov-on-Don para proporcionar ayuda médica al piloto.
El Comité de Investigación de Rusia inició una investigación sobre el caso y la muerte del aeronauta.