El científico Stephen Hawking murió este miércoles a la edad de 76 años y desde hace muchos años atrás habría escogido el epitafio a colocar en su tumba.,Gran tristeza causó en el mundo, el fallecimiento de una de las mentes más brillantes del siglo 21, como fue Stephen Hawking. Pese a que ya pasaron algunas horas de su deceso, aún no se sabe ni el día, ni el lugar donde será enterrado, lo que si se conoce, es el epitafio que deseaba tener en su tumba. El científico afirmó en el año 2002 que quería que su lápida lleve inscrita la fórmula de la entropía de los agujeros negros, según información que publicó The New York Times. Esta ecuación fue un trabajo que desarrolló junto con el físico israelí Jacob Bekenstein en la década de los 70, y que representa un aspecto clave de sus hallazgos sobre los agujeros negros. PUEDES VER Stephen Hawking: Una excolega recuerda el día que “casi” lo mató Esta fórmula trata de relacionar la llamada entropía de Bekenstein-Hawking con la superficie del agujero negro. Ese término se refiere a la medida del desorden o la cantidad de información que alberga un objeto en la física. Hay que destacar que la primera persona en afirmar que los agujeros negros tenían entropía fue Jacob Bekenstein, tal como publicó The New York Times en el obituario a Stephen Hawking. En un principio el científico no aceptó esta teoría, pero posteriormente aplicó la mecánica cuántica, donde descubrió que, en efecto, no eran los abismos que los físicos habían creído que eran hasta entonces. Stephen se llevó la gran sorpresa que al descubrir que, según sus ecuaciones, los agujeros negros debían en efecto tener entropía y temperatura. Y que, por eso, emitían radiación, lo que más adelante se conocería como la radiación de Hawking. Esta radiación aún no se ha podido ver, debido a que es de una magnitud diminuta, muy difícil de detectar. Sin embargo, las simulaciones de agujeros negros realizadas desde los años 70, indican que lo más probable es que exista.