El salario mínimo en Perú ha sido un tema de discusión constante en los últimos meses, desde que la presidenta de la República, Dina Boluarte, anunció la evaluación. Actualmente, la Remuneración Mínima Vital (RMV) se mantiene en S/1.025, pero para 2024 se ha reavivado el debate sobre un posible incremento a S/1.500. El Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) ha señalado que las negociaciones continúan y ya se manejan fechas tentativas para la implementación de esta medida.
Antes de abordar la fecha concreta del posible aumento, es necesario comprender el contexto económico y las variables que influyen en esta decisión. El aumento del salario mínimo no solo depende de factores internos, como la inflación y el costo de vida, sino también de la capacidad de las empresas para absorber este incremento sin afectar sus operaciones.
El debate sobre el aumento del sueldo mínimo ha estado en la agenda del MTPE desde inicios de 2024. Según funcionarios del ministerio, el ajuste a S/1500 podría concretarse antes de finalizar el año, pero la fecha exacta aún depende de las negociaciones en el Consejo Nacional de Trabajo y Promoción del Empleo (CNTPE). Este órgano tripartito, compuesto por representantes del gobierno, empleadores y trabajadores, es el encargado de analizar los impactos que podría generar esta medida en los distintos sectores económicos del país.
En el pasado, los aumentos de la RMV se han realizado en función de factores como la inflación, la productividad y las condiciones macroeconómicas. Sin embargo, la coyuntura actual presenta retos adicionales, como el aumento del costo de vida y las dificultades financieras que aún enfrentan algunas empresas tras la pandemia. Estas consideraciones serán claves para determinar si el incremento se dará en 2024 o si será necesario posponerlo.
El incremento a S/1.500 en la RMV significaría un aumento del 46% en comparación con el salario actual de S/1.025. Si bien este ajuste mejoraría el poder adquisitivo de los trabajadores formales, también podría representar un reto para las pequeñas y medianas empresas (pymes) que dependen de márgenes de ganancia reducidos. Por este motivo, el MTPE ha subrayado la importancia de analizar detenidamente el impacto que este incremento tendría en la estructura salarial del país.
Es importante tener en cuenta que los aumentos del salario mínimo no siempre tienen el efecto deseado en términos de reducción de la pobreza o mejora de la calidad de vida, especialmente si no van acompañados de políticas complementarias que fortalezcan el empleo formal y protejan a las pymes. Por ello, el MTPE ha señalado que cualquier decisión sobre el nuevo monto de la RMV será cuidadosamente evaluada para minimizar posibles efectos negativos en el empleo.
El principal grupo beneficiado por el aumento de la RMV a S/1.500 serían los trabajadores formales que perciben el salario mínimo. Según datos del MTPE, la mayoría de los trabajadores con sueldo mínimo se concentra en los sectores de comercio, manufactura y agricultura. Estos sectores, que en su mayoría agrupan a empleados de pequeñas y medianas empresas, serían los que más sentirían el impacto de la medida.
Además, el incremento de la RMV también afectaría a los trabajadores del sector público y privado que se encuentran en regímenes especiales. Aunque este aumento no impacta directamente a los trabajadores informales, que representan más del 70% de la fuerza laboral en Perú, las autoridades esperan que la medida incentive una mayor formalización del empleo en el país.