Los distritos, ubicados en el Corredor Minero del Sur, son los más ineficientes en la ejecución de sus presupuestos para obras. Eso explica el descontento de comunidades que carecen de agua potable, servicios de salud, entre otros. Su nivel de gasto oscila entre el 30% y 50%.
Ccapacmarca es uno de los distritos cusqueños de la provincia de Chumbivilcas, por donde atraviesa la vía minera. Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (Inei), casi la mitad de su población es pobre (45.16%). Solo el 23% de las familias tiene acceso a todos los servicios básicos. Pese a esos indicadores, el gasto de su municipio en obras apenas superó el 30%. Se ubica entre los últimos lugares en el ránking regional.
Otro de los distritos con mínimo gasto es Velille. Según el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), solo el 1% de sus centros poblados tienen los servicios básicos integrados y sin acceso a internet.
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La municipalidad provincial de Chumbivilcas no es la excepción en la ineficiencia. Su ejecución no llegó ni a la mitad del presupuesto asignado. Solo el 30.9% de su población tiene saneamiento vía red pública o pozo séptico, según reporte del Midis.
Los distritos de Colquemarca, Chamaca y Livitaca también apenas bordean el 60% de gasto presupuestal. Todos estos distritos son parte del Corredor Minero del Sur.
Otras poblaciones cusqueñas por donde pasa la vía minera están ubicadas en la provincia de Espinar. Los distritos de Coporaque, Yauri y Condoroma superaron el 70% de ejecución en proyectos e inversiones.
En la región Apurímac, donde nace la vía, el distrito de Progreso, ubicado en la provincia de Grau, aparece también como ineficiente. Los otros distritos (Challhuahuacho, Tambobamba y Mara) ubicados en la provincia de Cotabambas alcanzaron el 70% de gasto.
Gasto de distritos.
Ccapacmarca y Velille son justamente los puntos en los que hasta el 23 de diciembre se mantenía bloqueado el corredor minero. La interrupción permaneció por 35 días debido a los reclamos en contra de la minera Las Bambas. Según la representante de la Defensoría del Pueblo en Cusco, Rosa Santa Cruz, el 80% de los conflictos sociales de la región Cusco están en torno al corredor minero.
Santa Cruz señaló que cada problema social es muy complejo y obedece a varios factores, entre ellos también se encuentra la ausencia del Estado para atender necesidades en salud y educación. “Las demandas son distintas y van cambiando en el tiempo, pero en muchas se ha identificado que la mayor parte del reclamo va dirigido al Estado y su ausencia”, apuntó.
Para el sociólogo José Lapa, esa ausencia puede acentuar más los conflictos. “El malestar en las comunidades que carecen de servicios básicos, salud, educación escala al ver una actividad que puede ser minera que pasa por su territorio y sienten que nos los beneficia”, ensayó.
Según Lapa, la corrupción y la ineficiencia de las autoridades locales son factores que suman en la escala de los conflictos sociales.
El gobernador Jean Paul Benavente, mencionó la necesidad de una política integral para atender los reclamos del corredor. Eso obliga a garantizar condiciones básicas en saneamiento, salud y educación. Esa tarea corresponde al Estado.
La premier, Mirtha Vásquez, arribó ayer a la ciudad imperial para participar hoy de la reunión en la comunidad de Huninquiri. El encuentro está pactado para las 9 de la mañana. Participarán también otros ministros de Estado, congresistas, gobernador regional del Cusco, alcaldes provinciales y distritales.
De los acuerdos alcanzados hoy dependerá la liberación más sostenible del corredor minero. Hace casi dos semana la minera Las Bambas paralizó sus operaciones debido a los conflictos sociales en Chumbivilcas.