Por: Ani Lu Torres L.
Hoy se cumplen seis días desde que el Gobierno decidió entregar a la empresa minera Southern Perú la licencia de construcción para el proyecto minero Tía María, ubicado en Arequipa.
Como se observa en la gráfica, han pasado diez años desde que el Gobierno paralizó el proyecto. Si bien la empresa ya tiene el visto bueno para empezar la construcción del proyecto, se ha comprometido a no hacerlo hasta contar con la licencia social.
Se trata de una tarea que representa un desafío para la empresa, el Gobierno y la comunidad y que vería su punto más álgido en la presente semana. Dirigentes de la comunidad del Valle de Tambo reiteran el inicio desde mañana de una huelga indefinida contra el proyecto minero.
La UGEL de Arequipa ya ha tomado la decisión de suspender las actividades escolares en los distritos de influencia directa del proyecto: Cocachacra, Deán Valdivia, Punta de Bombón y Mejía.
“Las protestas se iniciarán de manera pacífica”, advirtió Miguel Meza Igme, dirigente del Valle de Tambo. Los vecinos del valle colocarán banderas en sus viviendas y marcharán por las calles del distrito de Cocachacra. Ya por la tarde, decidirán qué acciones tomarán. “Lo que tenemos claro es que vamos a estar en el paro hasta que el proyecto Tía María esté cancelado”, dijo.
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La comunidad espera la llegada de los congresistas de las bancadas de Frente Amplio y Nuevo Perú, quienes se comprometieron a asistir a Islay. “Nos gustaría que como fiscalizadores, lo traigan al presidente Martín Vizcarra, porque no se ve voluntad de parte suya, nunca vino”, acotó. La consigna en este ambiente crítico es evitar un nuevo conflicto social, como ocurrió entre el 2011 y 2015, que dejó ocho personas fallecidas.
El proyecto minero es considerado por los gremios empresariales como “la señal para reactivar las inversiones en Perú”. Por ello, la Confiep ha respaldado la decisión del Ejecutivo. “Lo que el presidente ha hecho es lo correcto: entregar una licencia de construcción a una empresa que ha cumplido con todos los aspectos legales”, indicó María Isabel León, presidenta del gremio.
Siendo el principal cargo contra el proyecto el de la contaminación de la mina para el Valle de Tambo, Southern asegura que tomará precauciones. “El proyecto contempla uso de agua de mar para sus actividades. Descartamos usar el agua del valle”, afirmó el vicepresidente de finanzas de Southern Perú, Raúl Jacob.
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Durante el foro Tía María: Retos y Desafíos explicó que el proyecto contempla la explotación de los yacimientos La Tapada (de 425 millones de toneladas de cobre oxidado) y Tía María (de 225 millones de toneladas de cobre oxidado). En concreto, generaría más de US$ 273 millones al año para Arequipa, por concepto de regalías y canon. De los cuales, US$ 30 millones serán para el distrito de Cocachacra.
Pese a dichos compromisos, el gobernador regional de Arequipa, Elmer Cáceres Llica, ha indicado que el diálogo solo se generará si el Gobierno anula la licencia de construcción. “La licencia de construcción se ha dado a espaldas de nosotros. El diálogo debió ser antes de otorgarla”, declaró.
En respuesta, el ministro de Energía y Minas, Francisco Ísmodes, ha reiterado la posición del Gobierno para el diálogo.
“En realidad, nosotros hacia el consenso estamos yendo y al gobernador habría que decirle con claridad que siempre estuvimos dispuestos al diálogo y que en esta disposición, a pesar de las reiteradas convocatorias que le hemos hecho, él no ha querido seguir en ese proceso. Que acepte el diálogo y una mejor manera de resolver esta diferencia”, dijo.
Para Yamila Osorio, ex gobernadora regional de Arequipa, la desconfianza de la población está explicada por la ausencia del Estado. “No ha habido ese proceso de comunicación, de explicar qué observaciones del primer EIA se han levantado. Eso no ha existido”, indicó.
Cronología Tía María