Sebastián León, el primer alumno con discapacidad visual en ingresar a la UNI: "Las clases tienen su dificultad"

En un mundo donde los límites suelen ser impuestos más por la percepción que por las capacidades reales, Sebastián León ha demostrado que la verdadera fuerza radica en la determinación y el esfuerzo. Este joven prodigio, con un talento innato para las matemáticas, ha roto barreras al convertirse en el primer estudiante con discapacidad visual en ingresar a la prestigiosa Universidad Nacional de Ingeniería (UNI). Su historia es un testimonio de superación y una inspiración para todos aquellos que enfrentan desafíos en el camino hacia sus sueños.

Con el apoyo de sus profesores y un método de enseñanza adaptado a sus necesidades, Sebastián se encuentra actualmente en el tercer ciclo de la carrera de Matemáticas. A pesar de las dificultades que ha enfrentado, su pasión por el aprendizaje y su capacidad de retención lo han llevado a superar los retos académicos que se le han presentado.

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¿Cuál fue el método de enseñanza que ha aplicado para ingresar a la UNI?

Desde el inicio de su carrera, Sebastián ha experimentado un enfoque educativo que va más allá de las clases tradicionales. Los profesores de la UNI han implementado técnicas que le permiten comprender los temas de manera efectiva. “Las clases tienen su dificultad, pero me siento muy a gusto en ellas, así me hacen sentir los profesores”, comenta León.

El uso de descripciones detalladas y la lectura de lo que se escribe en la pizarra son parte fundamental de su aprendizaje. “(Los profesores) hablan lo mismo que escriben en la pizarra; es decir, algo que escriben deben leerlo para mí y así puedo retener la información”, explica. Además, las prácticas dirigidas se envían en formato de audio, lo que le permite acceder al material y practicar de manera efectiva.

¿Cómo fue su adaptación en el campus?

La adaptación al entorno universitario ha sido otro aspecto clave en la experiencia de Sebastián. A pesar de las barreras físicas que a veces se presentan, él ha encontrado formas de moverse con facilidad por el campus. “Hay algunas aulas que tienen escaleras y las uso sin problemas. En las aulas de otros pabellones tampoco he tenido dificultad porque no tienen escaleras, pero hay pasamanos”, señala.

Las autoridades de la UNI han tomado medidas para garantizar su bienestar, como la reparación de desniveles en los pasillos y la inclusión de elementos en braille en algunos baños. Aunque Sebastián menciona que su tacto no es muy sensible para leer braille, aprecia los esfuerzos realizados para facilitar su movilidad.

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¿Qué tipo de examen realizó Sebastián para ingresar a la UNI?

El camino hacia la UNI no fue fácil para Sebastián. En 2022, se preparó para el examen ordinario de admisión, pero no logró una vacante en el examen extraordinario por una pequeña diferencia. Sin embargo, su perseverancia lo llevó a solicitar resolver el examen de manera oral. Una profesora le leyó las preguntas, y él las resolvió mentalmente, lo que demostró su notable capacidad de retención.

“Pedí a la profesora que regresara a una pregunta en específico que no había podido resolver y así logré mi ingreso a la Facultad de Ciencias”, relata con orgullo. Su historia es un claro ejemplo de que, con esfuerzo y dedicación, los sueños pueden hacerse realidad.

El mensaje que nos deja Sebastián

La historia de Sebastián León no solo inspira a quienes enfrentan desafíos similares, sino que también resalta la importancia de la inclusión en la educación superior. Su experiencia en la UNI representa un paso hacia un futuro más accesible y equitativo para todos los estudiantes.